La perspectiva en el mercado petrolero en el mediano plazo pone al WTI y al Brent en 100 dólares por barril antes de que termine el primer semestre, así empuja a la Mezcla Mexicana de Exportación a los 80 dólares y a sus derivados, como la gasolina, sobre los 25 a 27 pesos por litro más IEPS.
Es decir, de menos, gasolina a 30 pesos, aunque podrían decidir reducir el más neoliberal de los impuestos heredados del PAN y el PRI: El malvado IEPS, hoy sacrificado, que en Magna paga sólo 37 centavos en lugar 5.50 pesos autorizados, en Premium cobra 1.32 pesos en lugar de 4.64 y en diésel 1.15 en lugar de los 6.04 pesos por litro.
El gasolinazo llegó y el subsidio se aplica a un impuesto, no al producto en sí y la estructura comercial de Pemex y de la SHCP pueden aguantar gracias a que el mercado está abierto por la reforma neoliberal de 2013.
La gasolina aumentará como en Texas, allá, hoy, el diésel, por galón, el precio promedio en manguera es de 3.53 dólares, la gasolina regular en 3.13, la mid grade en 3.44 – en México no hay- y premium en 3.73.
Si hace las conversiones le podemos decir que la gasolina en México, a pesar de la terquedad de la 4T, ya se cobra a precios internacionales. El mercado de la gasolina al menudeo tiene en este momento una enorme presión, altos precios del petróleo, la canasta OPEP, por ejemplo, está en 93 dólares por barril, una ganancia del 50% en un año; la producción es igual a la de hace 5 años, pero la demanda mundial de crudo rebasa los 100 millones de barriles diarios desde enero.
Viene una época de gasolina todavía más cara, México está a libre mercado y Pemex es el mayor importador ¿Qué pasa si decide que ya no va a comprar?
Buzos
1.- Ricardo Monreal insiste en ser optimista de los resultados que tuvo la reunión con el embajador de Estados Unidos, Ken Salazar, sobre la viabilidad de la reforma energética enviada por el presidente. Salazar quiso ser respetuoso y le llamaron la atención. La secretaria de Energía, Jennifer Granholm, fue más enfática que el embajador tanto en su reunión con el presidente como cuando habló con el líder de los senadores de Morena: Tienen una real preocupación sobre la reforma constitucional; el embajador quiso suavizar y terminó apaleado. Granholm, nos dicen, dibujó una situación a los políticos sobre la posibilidad de que, si no hay condiciones de equidad para la inversión de EU, pues mejor le dicen adiós al T-MEC; ya que que de nada serviría tenerlo firmado si no lo van a respetar. Las palabras “real concern” en la diplomacia son mucho más fuertes de lo que parece.
2.-La visita de John Kerry a México, nos explican, es para reforzar el mensaje de Granholm y para aclarar los malentendidos generados por el embajador Salazar. Su mensaje sobre las energías limpias va directo al corazón de la contrarreforma energética. Le pega a Manuel Bartlett, director de la CFE, porque llega como parte de la agenda empresarial estadounidense y, literalmente, con los pendientes que dejó la vicepresidenta, Kamala Harris, en junio pasado que tienen que ver con facilitar inversiones en energías renovables, no frenarlas. Por cierto, en la agenda de Kerry está la visita a la SRE con Marcelo Ebrard; no a la Sener, Semarnat, Pemex o CFE ¿Lindo no?