En el mundo actual es fácil ver la influencia de las megatendencias en la vida cotidiana. Una megatendencia es un cambio profundo y permanente a largo plazo, en la sociedad y en la forma de vivir y trabajar. Una nueva tendencia puede comenzar lentamente y pasar mucho tiempo para que se adopte masivamente, pero una vez que eso ocurre ya no hay vuelta atrás. El mundo ya no vuelve a ser el mismo.
- La historia está llena de ejemplos de estas tendencias, como el teléfono, el auto, la electricidad e Internet. Lo que tienen en común estas tendencias es que suelen tener una adopción muy lenta al principio, muchos años en las que no se les presta mucha atención, hasta que se produce un salto y de ahí la expansión es cada vez más acelerada. Algo que antes era muy costoso y poco necesario de repente se vuelve accesible y fundamental para todas las personas.
El gráfico de Our World in Data muestra el porcentaje de hogares en Estados Unidos que adoptaron ciertas tecnologías a lo largo de los años.
Ahí se ve claramente que la adopción de estas nuevas tecnologías es cada vez más acelerada. Por ejemplo, sólo el 10% de los hogares tenían electricidad en 1909. Durante años fue creciendo lentamente hasta que, en 1930, ya eran 68%, llegando a casi el 100% alrededor de 1955. Es decir, demoró 45 años su adopción generalizada. El caso de los celulares y computadoras ya muestran mucha más rapidez en su generalización.
Como inversores, parece que sería interesante identificar estas nuevas tendencias cuando recién surgen, de manera de poder subirnos a las acciones de estas empresas antes de que terminen de dar su gran salto. De esta forma, podríamos beneficiarnos de su crecimiento.
¿Pero, es siempre un buen negocio invertir en nuevas tecnologías?
La tecnología no beneficia a todos por igual
Está claro que las nuevas tecnologías mejoran la calidad de vida de la sociedad y nos hacen la vida más fácil. El tema es si realmente esa nueva idea tan emocionante ha sido una gran oportunidad de inversión. Ahí los resultados han sido dispares.
Es que pueden pasar muchos años para que una megatendencia se consolide y la última etapa es la más rápida por lo que pueden pasar muchos años para que tu inversión dé frutos. Además, puede ocurrir que las ganancias de la nueva tendencia sean capturadas por los usuarios y no por las empresas.
¿Cómo puede ser que pase esto? Te lo muestro con un ejemplo.
La energía solar ha sido una revolución en el mundo. Proporciona ahorros de costos a personas y reduce la contaminación ambiental. Por eso cada vez se usan más los paneles solares. Pensaríamos que eso tendría que haber beneficiado a quienes invirtieron en empresas de ese sector.
Bueno, los datos muestran algo diferente. Si uno analiza la evolución de los precios de las acciones de las empresas First Solar (FSLR) y Sun Power (SPWR) desde 2009 observa que han mostrado caídas de alrededor de 70%. Esto sucede porque la expansión de la energía solar dio lugar a la entrada de nuevos jugadores y a una guerra de precios que terminó afectando las ganancias de las empresas. Los usuarios fueron beneficiados por menores precios, pero los accionistas no lograron capturar ese valor.
Anticiparse da resultados
Esto no quiere decir que nunca dé resultados anticiparse a las nuevas tendencias. En otros sectores crecientes, como el de los vehículos autónomos, existen oportunidades interesantes que ya han dado sus frutos.
- Acciones como Tesla (fabricante de vehículos eléctricos) y Nvidia (empresa de chips que son fundamentales en los vehículos autónomos) han tenido un gran desempeño.
- Tesla ha subido 1.511% en los últimos 5 años mientras que Nvidia se revalorizó un impresionante 747%. Y esta tendencia tiene signos de apenas haber empezado ya que se trata de un mercado de US$ 3.100 millones en la actualidad esperándose que llegue a US$ 96.800 millones en el periodo 2027-2028.
Con esto no te estoy diciendo que tenés que comprar estas empresas. Pero viendo algunas de las megatendencias que están en desarrollo se pueden encontrar grandes oportunidades, en sectores como los pagos digitales, el e-commerce y la realidad aumentada, entre otros. Lo mejor es que podés acceder a cada vez más opciones de inversión desde Argentina mediante los Cedears.
Hoy un inversor argentino puede invertir en empresas que apuestan a nuevas tendencias en pesos desde montos muy bajos y sin moverse de su casa. Por supuesto que siempre es necesario informarse y asesorarse antes de realizar cualquier inversión. Como mostré, no todas las tendencias en expansión van a generar ganancias para los accionistas de las empresas.
Vivimos en un mundo de cambios cada vez más rápidos. Quienes puedan identificar a las empresas mejor posicionadas para aprovechar la adopción de nuevas tecnologías tendrán una ventaja inigualable para su portafolio.