A pesar de que Gabriel Espinoza salió en libertad del Centro de Detención de Adelanto en septiembre del 2020, no se le quita el miedo a la migración y aún sufre de pesadillas.
Por eso es que el programa Voces Resilientes, enfocado en la reinserción a la sociedad de los inmigrantes que salen de los centros de detención migratoria, creado por las organizaciones Inland Coalition for Immigrant Justice (ICIJ) y la Unión Americana para las Libertades Civiles del Sur de California (ACLU), le cayó de perlas.
“Me enseñaron ejercicios para evitar y lidiar con el estrés y el trauma”, dice.
Espinoza de 67 años de edad, estuvo detenido 5 años en Adelanto, de 2015 a 2020, por no tener un estatus migratorio.
“Me pusieron como condición para salir libre, que me tenían que poner un brazalete de monitoreo electrónico en el tobillo. Ya voy a tener 2 años con él”.
Pero reconoce que no se le quita el temor a ser arrestado y deportado porque su caso está pendiente de resolver.
“Estoy bailando en la cuerda floja, y ando siempre nervioso, con mucho estrés. Siempre sueño que la migración viene a detenerme de nuevo”.
Espinoza es de Michoacán, México, y lleva en el país desde 1961. Está casado y es padre de 2 hijas adultas.
El Programa Voces Resilientes fue diseñado para apoyar a los inmigrantes que estuvieron encarcelados a superar las barreras que enfrentan en su transición de regreso a sus comunidades.
“Las clases que se imparten son sobre trauma y salud mental, cómo navegar el sistema de migración, cómo alcanzar sus metas en la escuela, el trabajo y cómo crear su propia empresa”, dice Eddie Torres, organizador comunitario de ICIJ.
Cuenta que al principio del programa, los participantes no se sentían cómodos para hablar sobre sus traumas y la salud mental porque varios sufrieron abuso físico, sexual o emocional en Adelanto, y era difícil hablar de esos temas.
“Más adelante, se sintieron con más confianza para hablar y aprender a manejar el tema”.
Torres dice que este programa fue inspirado por la necesidad que vieron entre los inmigrantes que salían en libertad de Adelanto.
“No saben cómo regresar a su vida normal en la sociedad, y empezar de nuevo”, dice.
Torres explica que este programa será impartido dos veces al año, y también entre los propios graduados se va a crear a un grupo de mentores para que ayuden a otros inmigrantes que van saliendo de la detención.
“Queremos que sean un apoyo e inspiración para otros inmigrantes”.
Yadanira Arreola estuvo detenida en Adelanto, casi 2 años, y apenas salió en febrero 8 con un brazalete de monitoreo electrónico en el tobillo. Ha vivido en el país durante 28 años. Reside en la ciudad de Perris. Es madre de 6 hijos y tiene una nieta que nació cuando ella estuvo bajo arresto migratorio.
“El programa fue una gran bendición. Nos ayudó a mirar en qué dirección queremos ir”, dice.
Pero además, comenta que pudieron platicar de sus traumas con psicólos y les ofrecieron terapia.
“Nos enseñaron también a dónde pedir ayuda y a ver nuestras opciones”.
El programa motivó a ayudar a otros inmigrantes que están dentro o fuera de la detención, y que se encuentran desorientados.
“Es muy importante nuestro apoyo porque aunque tengamos familia, muchas veces ellos tienen su propia vida afuera y no te comprenden igual como alguien que ya estuvo ahí. Así que queremos ser una voz de aliento para los inmigrantes aún en detención”.
Arreola, inmigrante de Guatemala, revela que ella misma llama por teléfono a las mujeres detenidas para escucharlas cuando han tenido un mal momento con algún oficial y para darles esperanza.
“Yo tuve muchos ataques de ansiedad cuando estuve detenida”.
En lo personal, dice que el programa le sirvió mucho.
“Una sale de Adelanto llena de miedo, con temor y sintiéndote muy poquita cosa. El programa me dio conocimientos y me hizo valorarme y valorar las cosas que perdí durante los años que pasé privada de mi libertad. Ahora agradezco hasta por la felicidad que me da cuando el aire me pega en la cara”.
Lo que es más, el programa la inspiró a continuar con su educación. “Quiero terminar mi secundaria y estudiar para ser asistente dental. Quiero tener mi propio espacio y ser una mujer independiente”.
Fueron 7 los graduados del programa Voces de la Resistencia, 5 hombres y 2 mujeres.
Zoila Barahona, una inmigrante de Nicaragua que vive en San Bernardino, fue una de las graduadas del programa de reinserción a la sociedad, tras pasar 2 años con 2 meses detenida en Adelanto.
“El programa me benefició porque me refirieron a una clínica para recibir atención a la depresión y ansiedad que me surgió a partir de mi estancia en Adelanto, donde a uno lo denigran como ser humano y los empleados son muy racistas con quienes no hablamos inglés”.
Agrega que el impacto en la salud emocional de los detenidos en Adelanto se agravó durante la pandemia, ya que les quitaron el acceso a los programas, a las visitas y a los pastores de las diferentes iglesias que les llevan alivio espiritual.
“Además la atención médica es muy limitada”.
Dice que sufrió mucho pensando en cómo estarían sus dos hijas menores durante la pandemia mientras ella estaba encerrada en Adelanto.
“Lo mejor de este programa son las terapias psicológicas después de tanto sufrimiento. Yo todavía no puedo creer que estoy fuera y me da hasta miedo”, dice Zoila de 40 años.
José Topete, quien permaneció en detención en Adelanto durante 2 años 8 meses, y recuperó su libertad el año pasado, dice que el programa le está ayudando a recuperar la confianza en sí mismo.
“Salimos completamente dañados psicológicamente de todos los abusos que uno mira y hasta miré a un compañero morir”.
Añade que gracias al programa Voces Resilientes, aprendió cómo hablar con la gente, cómo buscar trabajo y como integrarse a la comunidad.
“Es muy útil para la gente que sale de Adelanto porque estos lugares son centros de tortura psicológica, una especie de campos de concentración. No deben existir. Nuestra meta es que se cierren. Gracias a este programa, ahora tengo un poco de alivio”.
El programa Voces Resilientes es el primer programa de reintegración a la sociedad dirigido a los inmigrantes que salen de los centros de detención migratoria.
“Es el primero en el sur de California, y muy probablemente de todo el estado. Queremos que la comunidad sepa que existe”, dice Torres.
El programa Voces Resilientes consta de sesiones que duran 8 semanas, las cuales brindan a las personas las herramientas y los recursos para encontrar sanación, seguridad y autodeterminación a lo largo de su viaje.
Todas los participantes en el primer Programa Voces Resilientes fueron encarceladas en el Centro de procesamiento de ICE de Adelanto en Adelanto, California.
La ceremonia de graduación comenzó con palabras del congresista Mark Takano, y al final se les entregó a los graduados un certificado de culminación del programa, seguido por música y comida para los graduados y sus familias.
El congresista Mark Takano dijo que siempre ha trabajado para garantizar que todos los inmigrantes, especialmente aquellos en los centros de detención, sean tratados con la dignidad y el respeto que merecen.
“Más recientemente, nos hemos comprometido a exponer las condiciones peligrosas e inhumanas dentro del centro de procesamiento de ICE en Adelanto. Estos centros de detención funcionan de una manera que rechazan el firme apoyo de nuestra nación a los inmigrantes y las comunidades de inmigrantes, razón por la cual siempre abogo por cambios sustanciales, así como por su cierre total”.
Dijo que en el Congreso, siempre pondrá de su parte para luchar por los derechos de los inmigrantes, pero no podrá lograrlo sin el trabajo de grupos como ICIJ y ACLU.
Su programa Voces Resilientes ha proporcionado a los graduados un plan de estudios para liderar su viaje hacia el crecimiento, la sanación y la autodeterminación ,después de su tiempo en los centros de detención.
“Ahora pasarán a ser mentores de otros que tengan experiencias similares. Estoy muy orgulloso de su trabajo. Lo que han experimentado puede no haber sido fácil. Pero ahora es su oportunidad para crear el cambio positivo que desean ver en sus comunidades. Yo sé que pueden hacerlo. Y yo estaré a tu lado para apoyarlos y animarlos”.