México acudirá a los Juegos Olímpicos de Invierno Beijing 2022, que arrancan este viernes, con una delegación conformada por cuatro atletas (Sarah Schleper y Rodolfo Dickson en esquí alpino; Jonathan Soto, en esquí cross country y Donovan Carrillo, en patinaje artístico) lógicamente nada comparado con la que acudió a los Juegos de Verano Tokio 2020. Aún así, Hubertus von Hohenlohe, histórico exatleta germano-mexicano, ha colocado la cimentación de un proyecto que puede hacer que nuestro país tenga mayor presencia en las competencias invernales pese a no ser geográficamente y climáticamente posible.
En entrevista con MedioTiempo, el presidente y fundador de la Federación Mexicana de Esquí, habló sobre la importancia de captar mexicanos en otros lugares como Europa o Canadá para encaminarlos a los deportes invernales tales como el esquí y sus diferentes disciplinas.
“Hemos hecho una estructura con una pequeña Federación de Esquí, pero estamos lejos de ser un deporte olímpico de invierno donde tengamos competiciones de diferentes atletas para que puedan ir. Hay poco todavía, pero sí hay interés de gente que lo puede hacer, pero cuando se dan cuenta de que es complicado llegar a Olímpicos lo dejan, con apoyo de más dinero y estructura podría beneficiar a México para tener más atletas”, contó.
Y es que Hohenlohe sabe qué hay varios factores que podrían ayudar a un crecimiento de México en estas competencias, pero la motivación es uno de los más importantes que ha detectado a lo largo de su carrera en la que participó en cuatro ediciones olímpicas invernales representando a México.
“La mayoría de esos mexicanos económicamente no tienen tantos medios y cuando se encuentran con obstáculos de dinero e infraestructura, lo dejan. Hay otros con poderío económico, pero cuando tienen que hacer esfuerzos para clasificar lo dejan porque prefieren echarse un tequila en un bar que ir a entrenar todos los días. Si se hacen centro olímpicos en lugares como Canadá, quizás haya gente que se fascine con el deporte, pero deben estar bien acogidos, entrenados y motivados, es mucho el tema de la motivación sobre todo cuando hay dificultades. Entonces cuando no tienes quién te apoye, quien te dé una patada es complicado que tener a alguien que te motive, un equipo detrás que cada mañana te exija para formar una unidad y fuerza que se vuelve importante y grande para dar resultados”.
No hay comparación
Otro tema que el directivo puso en la mesa son los patrocinadores, algo recurrente en el deporte federado en México. Hubertus recordó que nunca tuvo una marca mexicana que lo acompañará y tuviera visibilidad en las ediciones en las que participó como Sarajevo 1984, Lillehammer 1994, Vancouver 2010 y Sochi 2014.
“Nunca será un papel como el de Verano, pero que al menos se tenga una presencia. Hoy en día los deportes son globales, pero debe haber estructura y patrocinio. Yo tuve patrocinadores y nunca tuve uno mexicano, por ejemplo”.
Una delegación decente
Para esta edición, el esquiador dejó claro que el nivel de los atletas parece ser superior al de ediciones pasadas, lo que podría dejar una participación digna. Incluso, destacó el regreso del patinaje artístico con Donovan Carrillo tras la última participación de un mexicano con Ricardo Olavarrieta, en Albertville 1992.
“Tenemos cuatro deportistas como equipo, un patinador (Donovan Carrillo) que ya tuvimos una vez y ahora se repite. Tenemos otro de cross country (Jonathan Soto) que a lo mejor es un poco más bueno del que tuvimos la última vez (Germán Madrazo) y puede representar a México. Tenemos cuatro deportistas de media tabla que son dignos de representarnos”.