Hay un entrenador en el futbol mexicano que hace que un niño llore de emoción con el juego que transmite su equipo, que ha clasificado dos veces a la liguilla al club con la plantilla menos valiosa y que sueña con hacerlo campeón cuando nadie apuesta por ellos. Ese entrenador es Nicolás Larcamón.
Larcamón, un treintañero argentino que no jugó futbol profesional, hoy lidera a un Puebla que va encaminado a una historia de telenovela.
¿Cuál es la clave de su éxito momentáneo que incluso se llegó a especular con convertirlo en el entrenador de la Selección de México cuando Gerardo Martino vivió una crisis futbolística hace unas semanas?
Puebla, un equipo emotivo
La imagen del niño en el estadio de La Franja llorando por un gol de chilena de Guillermo Martínez fue emotiva y sacudió las redes sociales. Eso al final es el futbol: emoción, pasión, amor por tu equipo.
Ese es el Puebla de Larcamón que compite contra los poderosos del futbol mexicano y los derrota. El equipo más pobre económicamente da un espectáculo como si fuera el más rico y hoy es el líder del Clausura 2022 por encima de clubes como Rayados, Tigres, América, con planteles tres veces más valiosos económicamente.
Larcamón es la historia cada vez más aceptada en el futbol de una persona que no jugó y se convierte en un entrenador exitoso. En la banca del Puebla él parece más un jugador con vestimenta formal, quizás un asistente, pero no el DT.
Su método se basa en el esfuerzo colectivo donde el “que no corre no juega”. Y lo aplica a estrellas o novatos.
En el Clausura 2021 (primer torneo con Larcamón como DT), La Franja quedó en tercer lugar con 28 puntos y fue eliminado en semifinales por el Santos
Un torneo después, en el Apertura 2021, terminó en el séptimo lugar con 24 puntos, venció a Chivas 6-5 en penales en la reclasificación y fue eliminado en cuartos de final por el León.
Ahora, en el Clausura 2022, Puebla es el líder y tiene la segunda mejor defensiva con tres goles recibidos.
Los números de Larcamón con la Franja son para impresionar: 46 partidos dirigidos, 20 ganados, 15 empates y solo 11 derrotas. Una efectividad del 54%. Su estilo de juego se basa en un futbol agresivo que tiene el balón para proponer.
Lo detectó el Jimmy Lozano
La llegada de Nicolás a México fue curiosa. Lo vio por primera vez Jimmy Lozano hace tres años cuando viajó a Chile a ver partidos de futbol y le tocó presenciar un juego del club Huachipato, por lo que decidió recomendarlo al promotor Enrique Nieto.
La oportunidad le llegó cuando lo presentaron con los directivos del Puebla FC, quienes dudaron un poco, pero les convenció la claridad y la seriedad de Nicolás.
“Yo era una apuesta importante porque era un técnico sin renombre en México, nadie me conocía. Para ellos era más lo que tenían que perder, pero creyeron lo que les expuse”, declaró Larmacón al Canal de Javier Alarcón en YouTube.
El Puebla tampoco tenía mucho que perder porque solo había clasificado a siete liguillas desde 1996 -cuando empezaron los torneos cortos- y que no gana un título desde 1989-1990.
“Fue una apuesta que en un principio nos costó muchas críticas”, declaró Manuel Jiménez, presidente del Puebla, a ESPN tras la contratación del DT argentino, a quien firmaron por seis meses y después lo renovaron por año y medio.
Nicolás nació en 1984 en La Plata, con familiares en el futbol que le inculcaron el amor por el deporte. Intentó ser jugador pero se retiró a los 22 años cuando las lesiones no le permitieron seguir con el sueño. Ocho años después empezó la aventura de ser DT en el Deportivo Anzoátegui, en Venezuela. Luego dirigió en Chile a los clubes Deportes Antofagasta, Huachipato y Curicó Unido.
Un estudioso del futbol
Si se escucha hablar a Larcamón sobre el futbol da la impresión de inmediato de que es un estudioso por completo, un apasionado, un hombre que vive por y para el futbol.
Su carrera como jugador y su preparación le asemejan a la versión joven de José Mourinho, para quien no fue un impedimento no tener una carrera como jugador profesional para convertirse en entrenador en una época (año 2000) que era casi imposible que el futbol le abriera la puerta a nadie que no hubiera llegado como futbolista, al menos a la Primera División.
Y ser el entrenador de moda no ha mareado a Nicolás, quien se disculpó por una publicación del club Puebla en las redes sociales donde se burlaban de Rayados por su fracaso en el Mundial de Clubes. Esa humildad le ganó un seguidor más: Javier Aguirre.
“Me parece un señor Larcamón, aparte de buen técnico, es un señor de arriba abajo. Desmarcarse de una publicación…. si eso hizo Larcamón merece todos mis respetos, ya lo tenía como un técnico grandísimo, con valores y ética. Lo felicito”, dijo Aguirre.
El futbol es efímero. Hoy eres el entrenador de moda, mañana un desempleado más. Por eso el respeto importa. Y ese respeto, más su estudio del futbol, son dos de sus cualidades de Nicolás Larcamón, aunado a la juventud que le permite entender y relacionarse con el jugador de la época.
Pero todas esas felicitaciones al trabajo de Nicolás quedarán en el pasado si no logra hacer historia. Y va en camino a lograrla: hacer campeón al Puebla, un equipo por el que nadie apuesta -o apostaba- un centavo.