El portavoz de Unidas Podemos en el Congreso de los Diputados, Pablo Echenique, observó este martes que “no puede a ver un acuerdo migratorio en el que se acepte como normal que mueran masivamente personas en nuestra frontera”, como ocurrió en la valla de Melilla el pasado viernes.
Lo hizo en rueda de prensa antes de la Junta de Portavoces del Congreso, donde, sin querer entrar en las relaciones diplomáticas de España, denunció que lo sucedido “va más allá de cualquier acuerdo en materia de migraciones que se pueda haber establecido con Marruecos” y “cualquier persona tiene que sentirse horrorizada”.
Por ello, se reafirmó en la petición de una investigación que registró ayer el grupo parlamentario. Insistió en que si los fallecidos hubieran sido europeos, no se dudaría de que el tema tenía que investigarse, lo que le parece “una hipocresía muy evidente”.
Cuando se le preguntó por las referencias de distintos miembros socialistas del Gobierno a “mafias” como supuestas artífices del “asalto violento” a la valla, él constató que no se noticia de cuáles ni de si se las está persiguiendo, pero despejó que esto justificaría aún más la investigación.
Echenique anunció que iba a pedir en la Junta de Portavoces que el Pleno de esta tarde se inicie con un minuto de silencio para mostrar luto nacional por los fallecidos, algo que le parece “una cuestión de humanidad” independientemente de la posición política de cada uno.
El portavoz de Unidas Podemos no concretó qué votará Unidas Podemos a la petición de comparecencia del presidente del Gobierno, Pedro Sánchez, y el ministro del Interior, Fernando Grande-Marlaska, que han registrado las fuerzas soberanistas, Más País y Compromís, puesto que se mostró ”seguro de que va a abre comparecencia a petición propia”, porque “el tema reviste suficiente gravedad para que así suceda”.
Tampoco quiso valorar que ayer la portavoz del Gobierno, Isabel Rodríguez, impidiera hasta en cinco ocasiones a la ministra de Igualdad y dirigente de Podemos, Irene Montero, responder a preguntas sobre este tema en la rueda de prensa posterior al Consejo de Ministros, si bien fuentes cercanas a Montero aseguraron que ésta tampoco quiso expresar su opinión en Moncloa para respetar los cauces de comunicación oficial. “No voy entrar en las decisiones de comunicación de Moncloa. A veces ocurren estas cosas, no es la primera vez”, despejó.
Poco después de Echenique y en otra rueda de prensa, el diputado de En Comú Podem y secretario primero de la Mesa del Congreso, Gerardo Pisarello, apuntó directamente a Sánchez al juzgar que “ninguna persona con un mínimo de empatía podía decir que la operación fue bien resuelta”, como hizo el presidente el sábado.
En su opinión, muy al contrario, la de Melilla fue “una de las operaciones más aberrantemente resueltas” y “las palabras del presidente del Gobierno hieren y avergüenzan a muchísimas personas progresistas, también dentro del Partido Socialista”, puesto que “no hay ninguna razón geopolítica que permita justificar acciones abominables que se podrían haber evitado”.
Pisarello constató que no se puede condicionar el derecho a migrar dependiendo del color de la piel, y que los sudaneses tienen “tanto derecho a huir del horror como los ucranianos”, y censuró que poner el acento en las mafias, como está haciendo el PSOE, “es lo que hace la extrema derecha”, eludiendo los motivos para migrar y la responsabilidad de Occidente.
Por todo ello, el diputado que esta vez hizo de portavoz de los Comunes sentenció que “urge una rectificación” por parte de Sánchez y que ésta “solo puede ser creíble si viene acompañada de una condena de los hechos y de una investigación” como la que ayer pidió Unidas Podemos en proposición no de ley y que hoy ha reclamado también Naciones Unidas.