El presidente del Directorio de Silveira Negocios Rurales, analizó el momento y proyectó el futuro del negocio agropecuario. El Cr. Rodrigo Silveira Navarrete estimó que este año 2023 será “al menos bueno para el agronegocio”. Y estimó que “los precios de hacienda para la industria se van a recuperar en marzo cuando mejores la situación climática y China vuelva a operar con fluidez”.
-A inicio de un nuevo año, ¿Cómo ve al sector agropecuario en general?
-Lo veo sólido, pujante, en constante modernización, adoptando tecnologías de punta en los distintos sistemas de producción. Todos los que estamos en la cadena productiva apostamos a un agronegocio sustentable, lo que lo hace sostenible en el tiempo. Producimos y hacemos negocios cuidando el producto y medio ambiente. Apuntamos a la producción natural de carne a campo natural. Y también cuidamos las emisiones de carbono. Certificando carne carbono neutro, reduciendo la huella de carbono.
Somos la “última estancia del mundo” donde producimos carne a pasto, por esta y otras razones vale tanto nuestra producción.
-¿Qué balance hace del 2022?
-Fue un año muy bueno para el Agronegocio en su conjunto. Si analizamos los datos proporcionados por Uruguay XXI en su informe publicado este enero, vemos claramente que las exportaciones uruguayas alcanzaron un máximo histórico en el 2022. El informe establece que alcanzaron un máximo histórico en el año, con crecimiento del 16,5%, y por un total de US$ 13.356 millones. Está bueno que esta información llegue a los productores para que entiendan la diferencia entre lo bueno que fue el negocio y temas coyunturales de precio que ocurrieron en el 2do. semestre 2022. El mismo informe marca que entre enero y agosto se registraron subas interanuales en todos los meses y en el último cuatrimestre del año hubo caídas de las solicitudes de exportación
-¿Esperaba ese primer semestre, con todos los valores al alza?
-Era esperable la suba de precios de la hacienda a industria y detrás de esta la suba de la hacienda para reposición, dado a que el mundo estaba saliendo de la pandemia y se da el comienzo de la guerra en Ucrania, principal productor de alimentos de Europa al mundo. Disminuye la producción de alimentos en esa zona, lo que provoca un aumento de precios de los commodities. Por otro lado, la salida de casi todo el mundo de las restricciones por la pandemia, aumentó el consumo y eso hizo que subieran los precios de nuestros productos. No obstante ello, no esperábamos la magnitud del aumento de los precios.
-¿Qué opina del cambio radical que se dio en el segundo semestre? ¿A qué factores lo adjudica?
-Me parece que tanto la suba radical de precios que se dio en los primeros 6 meses del año como la baja que se dio en los últimos 6 meses del año, responde a que tenemos en la industria frigorífica un mercado de libre competencia, más allá de que pocos operadores concentran más del 50% de la faena. Esto demuestra que realmente compiten por las haciendas gordas y no existe oligopolio ni tampoco hacen colusión en la industria frigorífica. También lo vimos en la puja por la reposición en lo que es la demanda por ganados para sus corrales. En el primer semestre se disputaron las haciendas gordas dado a que tenían muy buenos contratos sobre todo con China, cuando el gigante asiático propone precios nuevos, incluso para negocios ya cerrados, en el segundo semestre se da la baja importante de precios. La industria concluyó el 2022 con importantes stocks de carne en sus cámaras. Y otro tema clave.
-¿A cuál se refiere?
-Si a este escenario le sumamos el factor climático que viene siendo adverso desde la primavera 2022, sobre todo para la producción ganadera, posicionó mejor a la industria para proponer precios inferiores.
¿Cómo analiza el mercado de los campos?
Excelente, Uruguay es una isla de estabilidad en Latinoamérica y te diría que en el mundo. Luego de la buena gestión presidencial, encabezada por el Dr. Luis Lacalle Pou, su gobierno, no sólo salimos airosos de la pandemia, sino que se dedicó a hacer relaciones para abrir mercados con el resto del mundo. Tiene clara la importancia de la libertad individual, así como también de un libre mercado para nuestro país.
-¿Coincide con su mensaje de apertura comercial más allá del Mercosur?
-Uruguay no se puede dar el lujo de perder divisas en aranceles. Ojalá se concrete el tratado de libre comercio con China, nuestro principal socio comercial. Si a esto le sumamos el cambio de la política que tuvo Chile, Colombia y por último Brasil, no me quiero detener en Argentina que desde el difunto Néstor Kirchner solo promueve políticas que no hacen más que ahuyentar a sus productores, haciéndolos emigrar a Paraguay y Uruguay donde encuentran mejores condiciones de producción. Volviendo a la pregunta de los campos, con este escenario Uruguay se posicionó como el último refugio de capital para inversores extranjeros que vienen a vivir y educar a sus hijos en nuestros colegios, invierten, generan trabajo y nos promocionan por el mundo. Esto no solo influye en el mercado de campos, sino que dinamiza toda la economía…
-¿Cómo ve el clima para invertir en el agro?
-El clima de negocios en Uruguay es bueno. Uruguay provee a las empresas las condiciones necesarias para que puedan invertir, competir, innovar y ser exitosas. El clima de negocios para invertir en el agro es muy bueno, por todo lo que hablamos anteriormente y además porque contamos con seguridad jurídica. Acá cuando se adquiere un inmueble rural para producir en él, no tiene problemas de titulación, no existe el riesgo de que el estado lo expropie, como sucede en países de la región, no hay problemas de inseguridad en comparación a la región. El agronegocio está en manos de empresas y personas serias donde todavía se mantiene lo pactado, “la palabra” sigue valiendo, eso habla de nuestras mejores tradiciones.
-¿Qué pronostica para la agropecuaria en el 2023?
-Me parece que el 2023 va a ser un año al menos bueno para el agronegocio. En el momento que hacemos esta nota hay déficit hídrico en todo el país. Sólo no lo está sufriendo el productor que invirtió en sistemas de riego y abrevaderos. Por eso es bueno mencionar que hay que aprovechar la ley de promoción de inversiones que permite acceder a estas herramientas. Me parece que los precios de hacienda a industria se van a recuperar en marzo cuando mejore la situación climática y China vuelva a operar con fluidez.
“El clima para invertir en agro es muy bueno, por la seguridad jurídica y porque la palabra vale”
Cuarto siglo de empresa familiar que se expande…
¿Cómo está en la actualidad Silveira Agronegocios?
-Creciendo, mantenemos un crecimiento sostenido en el volumen de negocios facturado. También creció Pantalla Uruguay por lo que estamos muy contentos. Además, estamos de fiesta, dado a que en septiembre del año 22 cumplimos 25 años en el mercado uruguayo. No voy a hablar de los Martillos de Oro que son 22, y 3 de Plata porque aburro al lector.
-¿Qué rescata de este cuarto de siglo de la empresa?
-Recordemos que nuestra empresa es una empresa familiar, fundada por Daniel Silveira, que hoy ocupa el rol de asesor y me tiene a mí en el rol de Presidente del Directorio.
-¿Qué proyecta?
-El ánimo de todos quienes trabajamos es optimista. Logramos consolidar distintas unidades de negocio que hoy son empresas por sí mismas.
-¿Por ejemplo?
-Los negocios que dirigimos son muchos: consignataria de ganado, socios fundadores de Pantalla Uruguay, somos una de las firmas líderes en ventas en el consorcio. Venta de insumos, todos los que necesita un productor. Logística. Administración de negocios, ya no sólo administramos establecimientos como en el pasado. Asesoramiento en inversiones. Consultoría.
-Hábleme del Bono Ganadero de la firma.
-El Bono Ganadero es un producto que creamos y lanzamos hace 8 años y surge de una idea que me traje de Argentina cuando realizaba la maestría en Agronegocios en la Universidad Austral de Rosario. Es una herramienta de inversión que a lo largo de estos últimos 8 años se ha consolidado y es elegida por distintos clientes nacionales y extranjeros.
-¿Qué perfil de inversores tiene este producto?
-Tanto conocedores del negocio agropecuario, como ajenos al mismo. En ese sentido fuimos modificando el producto para que sea accesible a clientes que tienen sumas pequeñas de dinero para invertir y también para que siga siendo atractivo para clientes que tienen grandes sumas de dinero con rentas que pueden alcanzar hasta el 10% anual en dólares estadounidenses y con las garantías necesarias para invertir con tranquilidad. Son inversores de diverso perfil, nacionales y extranjeros. Es la única herramienta de inversión agropecuaria que te permite ingresar al negocio ganadero con US$ 5.000, que en valores de terneros de hoy serían unas 14 cabezas. O sea que democratizamos el acceso a ser ganadero…
-¿Qué otras herramientas financieras están desarrollando en la firma?
-No me gusta llamarlas herramientas financieras porque nosotros, en nuestras distintas empresas, no tenemos ningún negocio financiero. Nuestro negocio, es el de estructurar negocios entre nuestros clientes. Contamos con una amplia red de relaciones donde tratamos de entender las necesidades de cada parte para brindarle soluciones, más servicios. Este trabajo lo realizamos desde la sede de Carrasco, Montevideo donde diariamente vamos a trabajar contadores, administradores de empresas, Ingenieros Agrónomos, algunos con magíster, otros con postgrados. Además de capacidad contamos con un excelente clima laboral, creo que eso el cliente lo ve y es lo que nos hace crecer. Nuestros servicios se venden “boca a boca”. En este ambiente creativo es donde surgen nuevas ideas de negocio.
-¿Cómo cuáles?
-Venimos trabajando desde el 2020 con nuestros clientes en inversiones en distintos rubros: agricultura, forestación, inversión en inmuebles rurales, urbanos y desarrollos inmobiliarios y como dije anteriormente en estructurar negocios. No sólo en el Agronegocio. Siempre inversiones a nombre del cliente. Nosotros acercamos negocios y en casi todos los casos lo administramos por cuenta y orden de terceros. Estamos instalando sede en Punta del Este para estar más cerca de nuestros clientes extranjeros que vinieron a radicarse en esta zona del país.
