En Aragón hay 57.000 familias monoparentales y el 80% de los casos, un total de 45.600, una mujer es la cabeza de familia. Cada vez son más las mujeres que deciden convertirse en madres solas, sin pareja. Es un modelo en auge que aumenta un 5% cada año. Ahora, la Ley de Familias las tiene en cuenta por primera vez y considerará como familia numerosa a aquellas formadas por mujeres solteras con dos hijos. No obstante, las reivindicaciones de este colectivo van más allá, y reclaman mejoras fiscales y conciliación, entre otros puntos. El programa ‘Objetivo’ de Aragón TV aborda la cuestión este jueves (21:45).
Las cifras constatan que cada vez son más las madres que eligen serlo en solitario. Es el caso de Olga Torres, quien finalmente decidió emprender esta aventura vistas sus circunstancias: “Siempre había tenido muy claro que quería tener hijos. Pero entiendo que, como todo el mundo, me había imaginado una situación ideal, con pareja… Pero llegó un punto, a los 35, que hablando con una compañera de trabajo me habló de la posibilidad de hacerlo a través de la Seguridad Social, porque aquí en Aragón se puede, y entonces dije: ‘Bueno, vamos a hacerlo'”
Olga reconoce que hay que tenerlo muy claro para lanzarse a formar una familia monoparental: “Si te paras a pensarlo mucho, no lo haces”. Recuerda los recelos que pueden aflorar cuando se hacen números o se piensa en todo aquello que implicas este tipo de maternidad. Pero si se toma una decisión, asegura los miedos se aparcan: “Te enfrentas a todo. A no dormir, a las circunstancias que te sobrevienen porque sabes que lo que tienes al lado, tu hijo o tu hija, es lo más importante que tienes en tu vida”.
Las familias monoparentales encabezadas por mujeres están cada vez más normalizadas. / Aragón TV
Familias como la de Olga, formadas por madres que eligen ser madres en solitario, se incrementan un 5% cada año en Aragón. Una situación que se ha indo normalizando en los últimos 15 años, como señala el sociólogo Pablo Redondo. Reconoce que este fenómeno “ha supuesto un reto para el Estado de Bienestar porque los servicios que hay en la sociedad destinados a las familias están pensados para el modelo tradicional. No están concebidas para familias monoparentales”. Por ello, es un reto para la Administración porque las ayudas económicas o los servicios de conciliación “no están pensadas para este tipo de familias“.
Detrás de estas madres suelen estar los abuelos. Son la respuesta a una conciliación casi imposible habiendo un solo progenitor. Y más, en el mundo rural. Es lo que ocurre en la familia de Esther Blas y su hijo Mario. Esther reconoce que el desplazamiento es el primer problema: “Te tienes que desplazar para todo. El pediatra, en Fuentes. A Zaragoza para cualquier actividad de psicomotricidad, etc.”. No obstante, los abuelos viven en Zaragoza y ella en Pina. Esther se queja de las ayudas que reciben y recuerda: “No es verdad que recibamos un montón de ayudas por ser familias monoparentales. En los pueblos se dan ayudas a familias numerosas que en Zaragoza se están equiparando con las monoparentales. Aquí en Pina no tenemos esa ventaja”. Con todo ello, critica que las administraciones no vayan todas a una: “Si en el pueblo de al lado tengo esa ayuda, ¿Por qué aquí no? Si en el pueblo de al lado tengo esa actividad, ¿Por qué aquí no?”, se lamenta.
Los abuelos acostumbran a ser la principal ayuda para la conciliación. / Aragón TV
En Aragón existe un carné de familia monoparental. Además, el Gobierno de Aragón trabaja con las asociaciones en una nueva Ley de Familias. Iniciativas que se suman a las estatales. Desde hace una mes, las familias monoparentales con dos hijos son consideradas como familias numerosas. Pero esta norma, para el colectivo, se queda “coja”. Pilar Ariza, de la Asociación Madres Solteras por Elección critica que el 70% de familias monoparentales con un solo hijo no están protegidas por el paraguas de la actual Ley de Familias: “Hemos presentado enmiendas con respecto a tres bloques. La primera es la equiparación de permisos. También con respecto a que una familia monoparental con un hijo es per sé una familia vulnerable, y otra por la presión fiscal que sufrimos las familias monoparentales”.
En su camino, estas familias han encontrado un aliado. Los jueces en Aragón están reconociendo el derecho de una madre sola a disfrutar de diez semanas más de permiso para el cuidado del menor. Las que corresponderían al otro progenitor. La vida de Natalia García ha cambiado un poco desde 2021. Su hijo Lorién tiene ahora una hermana y no ha tenido que luchar la ampliación de su permiso de maternidad en los tribunales. Lo tiene reconocido como todos los funcionarios de la Diputación General de Aragón. La única institución que lo recoge: “Estábamos viendo que a nivel nacional se estaban ganando alguna sentencia, no todas, pero era lanzarse por algo que nos avalan desde los tribunales europeos. Son los derechos de los menores. Sabíamos que algo bueno podía salir de ahí”.
Ahora la apuesta de Natalia, tras su segunda maternidad, va por avanzar en el ámbito de la conciliación. Reconoce que es muy complicado para cuestiones como ir al médico o para ir a trabajar. “Hay compañeras que trabajan en turno partido y tienen un gran problema con la conciliación. Y volvemos a lo mismo, es un tema económico y es lo más duro de nuestras familias monoparentales”, señala. Estas madres saben que el camino no es fácil y hay que luchara diario. Pero aunque les llamen así, no están solas: tienen a sus hijos y, juntos, forman una gran tribu.