Un empresario de criptomonedas ha dicho que quemó un dibujo de la pintora mexicana Frida Kahlo para crear arte NFT –los “Non-fungible Tokens”, que permiten adjuntar un certificado de propiedad no intercambiable a los contenidos digitales–, en la creencia aparentemente errónea de que aumentaría el valor de la obra de arte en la cadena de bloques. Ahora, además de no recuperar ni de lejos el valor de la obra, el artista está siendo investigado por las autoridades mexicanas por la maniobra.
En concreto, el Ministerio de Cultura de México está investigando la autenticidad de la obra. “En México la destrucción deliberada de un monumento artístico constituye un delito”, se lee en un comunicado oficial publicado a finales de septiembre.
Quema del dibujo “Fantasmones siniestros”
La acción del empresario Martín Mobarak tuvo lugar supuestamente en Miami a finales de julio. En un vídeo que publicó, se le ve primero sacando el dibujo “Fantasmones siniestros” de su marco en un evento. A continuación, prende fuego a la obra sobre un vaso de hielo seco.
Según los medios de comunicación, Mobarak había comprado el cuadro de 15 por 23,5 centímetros en 2015. Se dice que pagó diez millones de dólares estadounidenses (unos 10,3 millones de euros) por ella. Ahora quiere vender 10.000 NFT del cuadro con fines benéficos. El dibujo original procede de un diario personal de Kahlo (1907-1954), considerada la pintora “más cara” de América Latina.
Pero no todo ha salido acorde al plan. Según el New York Times, Mobarak solo se ha vendido cuatro NFT hasta ahora y recaudando tan solo unos 11.000 dólares.
“La gente puede ver que lo destruí. Pero no lo hice”, dijo Mobarak a Vice. “De esta manera lo estoy llevando al mundo. Estoy dejando que todo el mundo lo vea. Creo que hace más bien al mundo y hace una declaración en lugar de quedarse en la colección privada de alguien”, agregó.
¿Un Frida Kahlo real o falsificado?
Según varios medios, se ha sugerido que el propio dibujo podría ser una falsificación. No solo en el sentido de que todo el asunto parece insípido y destructivo, sino porque es dudoso que incluso posea una copia genuina del dibujo en primer lugar, según medios. Sin embargo, esto no sacaría a Mobarak de la situación sin otras repercusiones legales.
“Si realmente lo quemó, está infringiendo una ley”, dijo al New York Times la abogada especializada en derecho del patrimonio cultural, Leila Amineddoleh. “Y si no lo hizo, si fue una reproducción, entonces podría haber violado la ley de derechos de autor. Y si copió el original con intención de engañar, podría ser un fraude”.
Los NFT son certificados digitales de autenticidad que se refieren a objetos tangibles o bienes virtuales. Aunque puede haber cualquier número de copias idénticas de un objeto, solo un NFT puede considerarse original y, por tanto, puede atribuirse a un único propietario. Desde principios de 2021 se ha producido un boom de NFT en el mercado del arte. Se venden innumerables obras de arte digital en sitios web especiales.
FEW (dpa, New York Times, Vice, IFL Science)