El tribunal considera que el juez Nicklin se equivoc y recuerda que “la inmunidad estatal es un derecho absoluto”.
El Tribunal de Apelaciones de Inglaterra y Gales ha reconocido la inmunidad a Juan Carlos I en las actuaciones previas a su abdicacin como Rey de Espaa en 2014 ante la demanda por acoso que present la que fuera su amiga ntima Corinna Larsen por hechos que presuntamente tuvieron lugar entre 2012 y 2014. As, el juicio contra el rey emrito se celebrar, pero sin tener en consideracin el perodo mientras era Jefe de Estado.
En una resolucin, a la que ha tenido acceso Europa Press, el tribunal ha admitido el recurso de casacin que present el rey emrito y ha concluido que “la supuesta conducta previa a la abdicacin” de Juan Carlos I es “inmune a la jurisdiccin de los tribunales de este pas”.
El tribunal ha corregido as la conclusin a la que lleg el pasado 24 de marzo el juez Matthew Nicklin, del Tribunal Superior de Justicia britnico, que determin que Juan Carlos I no gozaba de inmunidad en Reino Unido tras su abdicacin en 2014 del cargo de Rey de Espaa.
La decisin tiene lugar en el marco de un procedimiento civil que se sigue en Reino Unido a raz de una demanda que present Larsen en 2020 para pedir a los tribunales que reclamaran al rey emrito una indemnizacin por los costes de su tratamiento mdico de salud mental, por la “instalacin de medidas de seguridad personal y servicios diarios de proteccin” y por la contratacin a “exdiplomticos y exfuncionarios del Gobierno” para que interviniesen con el objeto de “poner fin al acoso” que dice haber recibido por parte de Juan Carlos I.
El pasado 8 de noviembre, los abogados del rey emrito presentaron ante la corte de apelaciones los argumentos por los que consideraban que deba revocarse la decisin inicial del juez Mathew Nicklin de no reconocer inmunidad ninguna a Juan Carlos I por el presunto acoso denunciado por su ex amiga ntima Corinna Larsen, poniendo el foco precisamente en que, si segn ella el CNI particip en los hechos por orden del entonces monarca, seran “actos soberanos” e inmunes.
En una vista oral que dur poco ms de cinco horas, el tribunal escuch la peticin de la defensa de Juan Carlos I de revertir la decisin adoptada el 24 de marzo por el juez Nicklin, el cual determin que Don Juan Carlos no poda alegar ninguna inmunidad para evitar las reclamaciones civiles de Larsen.
La Justicia britnica autoriz al rey emrito a recurrir la decisin de Nicklin, pero solo respecto a los hechos transcurridos entre 2012 y 2014, por lo que la vista se centr en ese lapso, a pesar de que la demanda de Larsen dibuja un horizonte temporal que llega hasta 2020: primero la habra presionado para retomar la relacin y despus habra intentado perjudicarla en sus negocios como venganza.
El juez Nicklin ‘se equivoc’
Ahora, el Tribunal de Apelaciones ha dado la razn al rey emrito. En 26 folios, ha explicado que “la inmunidad estatal de la jurisdiccin civil de los tribunales extranjeros se aplica tanto a la conducta extraterritorial imputable a un Estado en el plano internacional, como a la conducta interna de un Estado, aun cuando esa conducta se refiera a procesos penales y no civiles en cualquier caso”.
La corte ha considerado que el juez Nicklin “se equivoc” y ha incidido en que “la inmunidad estatal es un derecho absoluto” que “impide cualquier examen de fondo”.
“El juez tambin se equivoc al considerar significativo para la pretensin de inmunidad estatal, si los actos de vigilancia e intrusin fsica en la propiedad del demandado bienes fueron realizados por agentes de la CNI u otros ‘contratistas’; y al concluir que no podra haber ‘ningn reclamo concebible de inmunidad funcional’ con respecto a contratistas”, ha sealado ahora la Justicia britnica.
Para la corte de apelaciones, el juez Nicklin “se equivoc al concluir que la conducta previa a la abdicacin alegado fue una conducta privada”. “En primer lugar, se centr errneamente en la causa del derecho interno de accin de acoso, cuando lo adecuado es considerar los actos individuales presunto. En segundo lugar, trat errneamente como determinante que los actos alegados fueran actos que cualquier particular podra realizar”, consta en la resolucin emitida este martes.
La actuacin del CNI sera atribuible al Estado
As las cosas, el tribunal ha incidido en que “si un acto es uno que ningn ciudadano privado -y slo un gobierno- podra llevar a cabo, es necesariamente una acto pblico o soberano”.
En el marco de la resolucin, ha hecho referencia a las alegaciones de Corinna Larsen, quien ha incluido en su demanda supuestas actuaciones de acoso por parte del director del CNI, Flix Sanz Roldn, que –segn ella– estaran orquestadas por el propio rey emrito.
El tribunal ha asegurado que si la propia Larsen indica que Sanz Roldn actuaba en calidad de director del CNI “l y los operativos del CNI con los que actu, actuaron en todo momento material o pretendieron actuar como sirvientes o agentes del Estado espaol”.
“Dado que el Estado es responsable de los actos realizados bajo el pretexto de autoridad, estn o no autorizados o sean lcitos en el marco nacional o derecho internacional, sus actos seran, en consecuencia, atribuibles al Estado espaol”, ha sealado.
Tras hacerse pblica la resolucin de la corte de apelaciones, Michael Kim de Kobre & Kim, asesor legal de la empresaria alemana, ha emitido un comunicado. “El reclamo de Corinna ahora puede avanzar hacia el juicio en el Tribunal Superior de Londres“, ha asegurado.
El abogado ha defendido que la sentencia de este martes “se aplica a un tema muy limitado”. “Se refiere nicamente al perodo en que Juan Carlos I era el rey de Espaa“, ha incidido, al tiempo que ha asegurado que parte de la demanda de Corinna relativa a 2014 “no se ve afectada y debera ir a juicio”.