El multimillonario y flamante dueño de Twitter, Elon Musk, promovió la filtración de una serie de debates internos de la anterior administración de la empresa que, según él, demuestran “lo que realmente pasó” cuando la plataforma decidió bloquear la difusión de una noticia del tabloide New York Post vinculada a denuncias de corrupción contra el hijo del presidente estadounidense Joe Biden.
Las filtraciones fueron publicadas en la misma red social por el periodista Matt Taibbi, después de que el hombre más rico del mundo anticipara que iba a dar a conocer el manejo de Twitter sobre lo publicado por el diario en octubre de 2020, pocas semanas antes de las elecciones presidenciales en las que Biden finalmente triunfó sobre el entonces mandatario republicano Donald Trump.
El periódico afirmó en ese entonces que el líder demócrata y su hijo Hunter estaban involucrados en negocios corruptos en Ucrania y China y difundió fotos y correos electrónicos suministrados por el abogado de Trump, Rudy Giuliani, quien dijo haberlos obtenido de una computadora “abandonada” en un negocio de reparaciones.
En un principio, Twitter dijo que el New York Post había violado su política de “materiales pirateados” ante las dudas sobre el origen de las filtraciones y su incidencia en los comicios presidenciales, por lo que bloqueó la publicación de los artículos sobre el tema.
El medio de comunicación se negó a eliminar un tuit sobre la historia, por lo que la plataforma suspendió su cuenta durante más de dos semanas, antes de revertir la medida el 30 de octubre de 2020.
Musk, que en las elecciones de medio término del mes pasado llamó a votar a los republicanos, acusó a la red social de neutralizar la difusión de las informaciones y le brindó al periodista Taibbi los documentos con los debates internos sobre cómo se manejó el caso con el objetivo de “restaurar la confianza de la gente” en la organización.
En un hilo de Twitter y en base a ese material brindado por Musk, Taibbi afirmó que durante 2020 la plataforma aceptó revisar posteos ante quejas tanto del equipo de Trump como de Biden, aunque aclaró que el “sistema no estaba equilibrado” y había mejores canales de diálogo con los demócratas.
Respecto al manejo de la publicación del New York Post, indicó que la plataforma “tomó medidas extraordinarias para suprimir la historia, eliminando enlaces y publicando advertencias de que podría ser “insegura”.
“Incluso bloquearon su transmisión por mensaje directo, una herramienta hasta ahora reservada para casos extremos, por ejemplo, la pornografía infantil”, apuntó.
Las capturas de pantalla difundidas mostraron a los equipos legales, de políticas y de comunicaciones de Twitter debatiendo, y algunas veces discrepando, sobre si restringir el artículo bajo la política de la empresa sobre contenidos hackeados y las advertencias generales del FBI ante posibles intentos de injerencia rusa en las elecciones.
La decisión de bloquear la historia original de Biden del Post fue “tomada en los niveles más altos de la compañía, pero sin el conocimiento del CEO Jack Dorsey”, según Taibbi.
Dorsey, entonces responsable de la compañía, indicó posteriormente al bloqueo de la historia que lamentaba la decisión tomada por sus empleados.
El hilo publicado por Taibbi reveló incluso una conversación con el congresista demócrata por California Ro Khanna que, pese a declararse “partidario total de Biden”, cuestionó la decisión de Twitter.