La afición de los vascos por la montaña y la naturaleza es proverbial y no es extraño que de esa inclinación a los montes, los caminos y las playas surja también una lista más bien amplia de buenos fotógrafos. Ese es el caso de David de la Iglesia, primero aficionado, hoy profesional de la fotografía de paisaje que acaba de publicar su primer libro La Aventura de la Fotografía de Paisaje (PhotoClub Anaya Multimedia).
Lo primero que llama la atención en esta obra es que al leer el índice nos damos cuenta de que nos encontramos ante un libro sobre un tema trillado pero con un planteamiento diferente, personal e interesante. En esa relación de contenidos hay poca cabida para las fórmulas que nos digan qué equipo, qué objetivo, cómo debe ser el trípode o cuáles los filtros que tenemos que usar. Por el contrario, el espíritu que guía todas las páginas del libro es el de ir más allá y explicar lo que en la experiencia del autor constituye el quid de la fotografía, de la profesión y de la toma, que casi nunca consiste en el equipo, el complemento o la marca.
En ese esfuerzo de compartir con el lector el conocimiento, lo que hace es poner en común la experiencia personal que, conforme lo vas leyendo, te das cuenta de que es tan colectiva como individual porque en las páginas de La Aventura de la Fotografía de Paisaje David de la Iglesia habla de las frustraciones derivadas de tantas y tantas sesiones fotográficas, de los halagos, del vértigo de liarse la manta a la cabeza para convertirse en fotógrafo profesional, de la importancia de la empatía y las amistad con otros fotógrafos, la necesidad de establecer objetivos grandes y pequeños, el establecimiento de precios para el trabajo…
Quizás de una enumeración como la anterior pueda surgir la impresión de que nos encontramos ante un libro de “autoayuda”. Como esta etiqueta no tiene muy buena fama, no diría yo que lo es pero sí puedo afirmar que leyendo la obra reconoces perfectamente angustias y dilemas compartidos y encuentras respuestas a preguntas que tiene que ver la fotografía, en este caso la de paisajes, aunque muchos de los asuntos expuestos no tienen por qué circunscribirse a una especialidad fotográfica concreta.
En los once capítulos que totalizan la obra hay lugar para casi todo. Se habla entre otras cosas del “cacharreo”, de los filtros, de la edición, del proyecto fotográfico, de la balanza entre creación y trabajo, de los NFT y la Inteligencia Artificial… Pero no encontramos apartados clásicos de los manuales al uso tales como las reglas de la composición, la profundidad de campo, los cálculos de tiempo para la fotografía de la vía láctea, etc.
David de la Iglesia es hoy en día fotógrafo profesional de turismo, imparte talleres y clases y se acaba de convertir en “autor”. Quien quiera conocer su estilo y las temáticas que aborda y con ello tener un anticipo de las muchísimas fotografías que va a encontrar en La Aventura de la Fotografía de Paisaje, puede hacerlo en su página web donde están reflejadas todas las fotografías del libro aunque éste ofrece muchísimas más que las contenidas en su espacio en la web.
La Aventura de la Fotografía de Paisaje está editado por Anaya Multimedia dentro de sus sello PhotoClub y contiene 278 páginas encuadernadas en rústica con tapa flexible y un formato de 185×240 mm.
El libro puede ser adquirido a través de este enlace: La Aventura de la Fotografía de Paisaje (PhotoClub Anaya Multimedia).