La capacitación, la asesoría y el acompañamiento a los ganaderos es una labor permanente del gremio, para lo cual se cuenta con diferentes aliados en las regiones.
Es el caso del evento que se realizó en Chigorodó en el Urabá antioqueño, en una convocatoria de Fedegán, a través de [email protected], con el apoyo de Suganar y Laboratorios Vicar para capacitar a ganaderos de esta región.
Según Santiago Soto, de Laboratorios Vicar, se destacó la participación de los estudiantes de Apartadó y Chigorodó, así como de ganaderos y de personas que trabajan en los almacenes agropecuarios quienes mostraron interés no solo en vender productos sino en aprender para asesorar a los ganaderos.
El evento se orientó a capacitar a los productores en temas sanitarios y reproductivos de sus hatos con el fin de ser más eficientes y rentables, aplicando las mejores prácticas.
Entre los aspectos donde se observó una falencia grande por parte de los ganaderos de la zona estuvo la falta de registros para poder hacer un seguimiento de los animales y tomar decisiones. (Lea: Urabá, una zona con amplio potencial exportador ganadero)
Así mismo, es fundamental tener planes sanitarios, reproductivos y nutricionales para que se tengan mejores resultados en el negocio, al tiempo que se mostró la necesidad de ver la actividad como una empresa.
“Hay que ser más eficientes en el manejo de registros, que administren sus fincas y que no la manejan como un negocio de cajón sino que lleven los datos de los animales, sus nacimientos, el peso, las fechas en que se realizan los programas de desparasitación, los apareamientos”, indicó Soto.
Agregó que en la zona solo el 1 % manejan mejoramiento genético y básicamente es inseminación artificial que es lo más fácil aunque algunos ya realizan transferencia de embriones y por eso la idea es subir ese porcentaje para ser más eficientes.
Igualmente se les planteó la necesidad de descartar animales que están en los hatos y que llevan varios años sin ser preñados, vacas que están consumiendo insumos sin dar crías y con muy baja producción de leche.
Para ser eficientes se deben llevar registros, tener datos de los costos, descartando animales, hacer mejoramiento de pasturas, efectuar desparasitaciones, realizar mejoramiento genético, entre otros aspectos.
Como en muchos casos, estos ganaderos ya son mayores se les invitó a que motivaran a los hijos a que sean los que lleven los registros en una tabla de Excel y que investiguen por internet. (Lea: Urabá trabaja para obtener sello de calidad en carne bovina)
Los asistentes preguntaron sobre cómo implementar esos programas y para ello se les invitó a trabajar de la mano de un palpador. Lo primero es incluir los animales en un programa del mejoramiento genético, quitarles el toro antes de un mes y es que hubo mucho interés por el tema.
Sobre los costos, que fue otra de las inquietudes recurrentes se les indicó que se pueden comprar pajillas para comenzar de esta manera esa labor y que no resulte muy costoso.
Se recomienda retirar los toros un mes antes, hacer una palpación y observar si está vacía o preñada y ver a dónde se quiere llegar, qué tipo de crías quieren tener, bien sea de carne o de leche o doble propósito. También deben buscar asesoría por ejemplo para hacer cruces.
Para el programa de mejoramiento se necesitan unos protocolos, hacer una sincronización, aplicarles unas hormonas, comprobar que le están dando la sal mineralizada, entre otros temas.
Entre las recomendaciones está el uso del pastoreo inteligente, el silvopastoreo, buscar otras fuentes de alimento para el ganado y no depender tanto del concentrado, así mismo abonos orgánicos para las pasturas, el mejoramiento genético, entre otras prácticas. (Lea: Urabá antioqueño tendrá montaje de 5 sistemas silvopastoriles)
Soto manifestó que Vicar quiere enseñarle a la gente cómo ser más eficientes porque los productos pueden ser muy similares entre un laboratorio y otro, por lo cual se debe asesorar al ganadero para la mejor toma de decisiones.
Luego de la actividad se generó una base de datos y se cuenta con personal en la zona para hacer seguimiento y acompañamiento.
Este tipo de actividades se quieren replicar en otras zonas ganaderas del país como Montería, Planeta Rica o en otras regiones de Antioquia.