En 2023, la cadena hotelera Riu presenta dos novedades para México en materia de Responsabilidad Social Corporativa (RSC). La primera es que el monto que se invertirá en los programas sociales asciende a 800 mil dólares, y además se extenderá al Pacífico mexicano, donde cuenta con varias propiedades. Para conocer sobre diversos aspectos relacionados con el tema de la sostenibilidad y la RSC, Reportur.mx conversó con Catalina Alemany, directora de RSC de Riu.
En materia de RSC, ¿Cómo se perfila el 2022 y el 2023 para RIU?
Nosotros emprendimos una estrategia en 2019 que sufrió el parón de 2020, y en 2021 lo único que pudimos hacer es ser continuistas con aquellos proyectos que habíamos empezado. Pero en 2022 la gran novedad con respecto a México es que estamos ya abriendo acciones y proyectos en todos los destinos mexicanos donde Riu opera, y estamos planeando cuál va a ser el futuro plan para 2023, que además va a duplicar esos recursos y esfuerzos.
¿Qué ha significado México en materia de sostenibilidad para Riu?
La primera es en materia de sostenibilidad económica. Riu ha aguantado el negocio durante una época difícil, el 2021 fue un año de recuperación, y lo fue gracias a que México pudo recuperar su actividad y tuvo políticas que garantizaban la seguridad de los clientes, y además fue muy ágil en reaccionar, por eso el 40 por ciento de nuestra plantilla en 2021 es mexicana, porque aguantó sobre sus hombros el negocio de Riu. Por eso es tan importante la sostenibilidad económica.
A partir de allí podemos hablar de otros aspectos. Una parte importante de nuestro equipo de sostenibilidad, quien decide e idea las políticas, está aquí en México; yo siempre digo que en materia de RSC nuestro talento es mexicano y además lo exportamos al resto de la organización en los demás destinos.
Creo que México es líder en materia de sostenibilidad, no solamente turística, en el ámbito académico tenéis un liderazgo a nivel mundial, hay muy buenas universidades y se están haciendo estudios metodológicos en México que no se están haciendo, por ejemplo, en España. En eso sois pioneros en muchas cosas, y a nosotros ese talento que nace desde aquí nos está sirviendo para adaptarlo como modelo.
En la construcción de los nuevos hoteles de Riu, ¿Cuáles son los conceptos que tienen en materia de sostenibilidad?
Hay 4 aspectos: uno tiene que ver con los criterios de edificación, y es cómo diseño un edificio para que impacte lo menos posible en cuanto a su actividad, es lo que se llama el ecodiseño. A partir de ahí tenemos otros tres aspectos. El energético, el hídrico y los residuos. Te pongo ejemplos muy concretos, aparte de cosas que ya son obvias como que la energía sea de autoconsumo o que seamos capaces de recoger esa maravillosa agua de lluvia y hacer algo con ella, cosas que tenemos que incorporar en el diseño de nuestros complejos.
Nosotros teníamos una dependencia para almacenar los residuos y los desechos pensada con estructuras de hace décadas, con políticas ambientales que no existían. Bueno, pues deberemos dimensionar esos espacios para los nuevos usos, y para poder hacer que el residuo se convierta en un recurso. Eso es algo que no estaba en nuestros planes ni siquiera hace cinco años. Ese tipo de cambios son los que necesitamos hacer a la hora de reformar o de idear un nuevo hotel.
¿Es lo que se llamaría el turismo regenerativo?
Así es. A nosotros lo que nos gustaría es que el turismo acabara siendo el buen vecino que merecen los que están cerca de los hoteles, y por eso nos queda un gran trecho, para acabar convirtiendo el turismo en un motor de bienestar, de progreso y de desarrollo, pero no siempre es así.
Hay impactos positivos del turismo muy obvios: la contratación de proveedores, el empleo que genera, pero hay otros impactos que normalmente son invisibles y que acaban haciendo del turismo un mal vecino. Ese es nuestro principal reto, cómo convertirnos en un buen vecino; os he dado ejemplos sobre los residuos, sobre la energía o sobre el agua, pero también sobre el bienestar. ¿Por qué no nos involucramos en proyectos de educación, de salud, por qué no mejoramos las condiciones de vida de nuestros vecinos, de la comunidad que nos rodea? Yo creo que ese es el gran reto, devolverle a la comunidad lo que la comunidad nos está dando.
A veces se utiliza el tema sustentable para tratar de lavar la cara de las empresas, lo que se ha denominado el “green washing”.
Así es, el green washing yo también lo llamo el Tinder empresarial, es como si tuviéramos una aplicación nueva en la que podemos mostrarnos mucho más guapos de lo que somos, y eso daña la reputación no tanto de las empresas sino de la sostenibilidad, que se acaba convirtiendo en un filtro para gustar más a los clientes, a los inversores, a aquellos que nos rodean, a los medios de comunicación, los que van a hablar bien de nosotros.
Lo que intentamos desde Riu es darle una pátina de honradez a eso, de honestidad. ¿Tienes arrugas? Enséñalas. ¿Tienes un par de kilos de más? Enséñalos. Porque si no lo haces es muy difícil que te los vayas a quitar. Yo lo que digo es que, si quieres tener mejor aspecto, lo que tienes que hacer es cuidarlo, no ponerte un filtro. Si no te gusta verte como te refleja el espejo, tienes que hacer algo. Lo importante es que seamos rigurosos acerca de lo que contamos en materia de sostenibilidad. Si nunca reflejamos lo que somos, es muy difícil cambiarlo. Sostenibilidad tiene que empezar a conjugarse con honestidad.