El sector primario encara el inicio del nuevo curso, acusando altos costes de producción, bajos precios en origen y una previsión de mermas generalizadas en la producción por culpa de la sequía, cuestiones ante las que reclama ayudas al Gobierno, al tiempo que no descarta emprender nuevas movilizaciones. Cooperativas Agro-alimentarias de España y las organizaciones agrarias Asaja, COAG y UPA coinciden en resaltar esas cuestiones como los principales problemas del campo español, junto a otros como la especulación, la falta de fertilizantes o las deficiencias en la ley de la cadena.
Son los mismos problemas por los que los profesionales del primario ya se manifestaron la pasada primavera, agravados ahora por las incertidumbres que afrontará la economía española este otoño, en especial por las restricciones de gas y la persistencia de una inflación elevada. “La solución no son tanto las movilizaciones, sino sentarse y arbitrar medidas porque hay que seguir manteniendo la estructura productiva de la agricultura española que nos da de comer a nosotros y a los europeos”, ha dicho a Efe el presidente de Cooperativas Agro-alimentarias de España, Ángel Villafranca.
La organización entiende que el campo es “motor de recuperación”, una industria que “no se deslocaliza” y que está siempre en el territorio”, y que todo ello “tiene que verse reflejado en medidas de incentivo”. En concreto, el máximo representante de Cooperativas ha mencionado que hay aspectos, como “el tema fiscal”, en el que las autoridades pueden ayudar, así como en amortiguar el coste de la electricidad, mejorar el sistema de regadío y apoyar al transporte, tanto a nivel nacional como internacional, entre otras cuestiones. “Entendemos que en este momento toda la sociedad está sufriendo la crisis energética y la inflación, pero en el campo se agrava la situación porque somos un sector debilitado desde meses atrás que no puede repercutir todo el incremento de costes en el precio final y eso nos ha llevado a economías muy débiles y de subsistencia”, ha expresado Villafranca.
Por otro lado, fuentes de Asaja han comentado a Efe que este mes tendrá lugar la Junta Directiva en la que se analizará si se emprenderán nuevas movilizaciones, y de momento reiteran lo que comunicaron el pasado agosto, cuando la organización auguró un “otoño caliente ante la insostenible situación que vive el sector agrario”.
Asaja señaló entonces también que las protestas se vienen sucediendo en distintos puntos de España desde el comienzo del verano y que en la Junta Directiva el presidente de la organización, Pedro Barato, “propondrá comenzar una nueva fase de movilizaciones en todo el territorio nacional de cara al otoño”. “Parece ser que este Gobierno olvida la labor esencial que el sector primario desempeña proporcionando alimentos de primera necesidad a la sociedad. Si esta tarea se interrumpe, o no llegan las producciones en las cantidades necesarias al mercado, se estará poniendo en riesgo no solo el futuro del sector agrario, sino también nuestra soberanía alimentaria”, expresó Asaja en agosto.
En tanto, fuentes de COAG han indicado a Efe que “de momento”, y tras celebrar este viernes una Comisión Ejecutiva, “no hay ninguna decisión respecto a emprender un proceso de movilizaciones”. Sí han iniciado, no obstante, un “análisis de la situación” en los distintos sectores agrícolas y ganaderos y un “proceso de escucha en las comunidades autónomas con las uniones regionales de COAG”.
Finalmente, fuentes de UPA declararon a Efe que de momento no tienen previsto emprender movilizaciones, pero que están “vigilantes y denunciando los problemas que sufren los compañeros y compañeras en el campo”. La situación es dramática en muchos casos. La especulación, la no repercusión de la subida de los precios en los productores, los problemas después de los incendios… Somos conscientes del ambiente que se está gestando“, indicaron las fuentes.