Varios expertos ya han pronosticado que 2022 podría ser el año en el que la burbuja de los NFT estalle tras un 2021 meteórico. Desde muchos sectores no se les acaba de encontrar la utilidad real a estas obras de arte digitales originales, más ahora cuando muchas personas se están dando cuenta de que los usuarios se venden los NFT a sí mismos.
En un artículo publicado por Bloomberg, el medio apunta que la plataforma LooksRare, que se ha convertido en el mercado líder de NFT por volumen de negociación, muestra que la mayor parte de la actividad consiste en realidad en usuarios que se venden tokens a sí mismos para ayudar a ganar recompensas en forma de más monedas.
Pero eso no es todo, según un informe de Chainanalysis el mercado de NFT está plagado de personas que compran sus propios tokens no fungibles o NFT para subir su precio. Esta práctica se conoce como wash trading: comprar y vender un valor con el fin de engañar al mercado.
El wash trading se volvió habitual primero en los mercados tradicionales y que ahora ha llegado al mundo blockchain. Esta situación tiene lugar también por la falta de regulación a la que se han sometido hasta ahora los tokens no fungibles, algo que probablemente cambie antes o después, como en el caso de las criptomonedas, que cada vez están más cercadas por las autoridades.
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Según el informe de Chainanalysis, los mismos operadores vendieron los mismos NFT una y otra vez al menos 25 veces, y se ha identificado a un grupo de 110 presuntos operadores de lavado de NFT que han obtenido unos 8,1 millones de euros de beneficios con esta práctica.
Los investigadores también han descubierto direcciones de correo asociadas a estafas, y se calcula que un total de 1,2 millones de euros de ventas solo en el cuarto trimestre de 2021 procedieron de las direcciones ilícitas.
Siguiendo con el goteo de cifras, aproximadamente 16.300 millones de euros del volumen de operaciones en LooksRare, o alrededor del 95% de la actividad total, se pueden atribuir al ya mencionado wash trading, según los datos del rastreador CryptoSlam recogidos por Bloomberg.
De hecho, Bloomberg apunta directamente a la plataforma, asegurando que ayudó a enmascarar el enfriamiento de la demanda en el mercado NFT.
Esta situación ha tenido un impacto directo en OpenSea, la plataforma que hasta ahora había sido la reina en el mundo NFT, ya que el volumen de ventas ha bajado un 67% en los últimos 30 días y el número de comerciantes ha disminuido un 23%, según datos de DappRadar.
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