El Sindicato Unificado de Policía (SUP) ha pedido esta mañana la devolución de los inmigrantes que han entrado en Melilla rompiendo la puerta del control fronterizo de Barrio Chino. De lo contrario, afirma, “el problema lo vamos a tener siempre”, según comentó al respecto el secretario general de la organización sindical, Jesús Ruíz Barranco.
“Esto no ha acabado”, vaticinó para señalar que la presión migratoria sigue en los mismos términos a pesar del cambio en las relaciones entre España y Marruecos. “Parecía que después de los acuerdos con Rabat se iba a intentar que no hubiese presión pero se sigue produciendo”, señaló.
El SUP ha recordado que durante estos días pasados se estaban dando avisos de que podría producirse un salto numeroso como el que se ha llevado a cabo a primeras horas de esta mañana. Se refería a los enfrentamientos que se han producido en Marruecos y que se han saldado con decenas de heridos de las fuerzas marroquíes.
“Yo en política no me meto pero estamos viendo que sigue la presión migratoria, que las mafias se aprovechan y que los miles y miles de subsaharianos que pueda haber alrededor de Melilla lo van a seguir intentando. Esto no ha acabado”, sentenció el dirigente sindical.
Jesús Ruíz indicó que se trata de una cuestión que tampoco se soluciona aumentando el personal. “Tengamos el personal que tengamos, un salto masivo de 500, 600 o 1.000 personas y por mucha policía que pongamos, al final se produce la batalla campal”, reseñó para dejar claro que el primer paso es que la policía de Marruecos pare los intentos.
Aunque se desconoce a esta hora si hay heridos entre los miembros de los Cuerpos y Fuerzas de Seguridad del Estado, Ruíz Barranco está convencido de que los inmigrantes han debido ser “muy violentos”. “Habrán sido muy agresivos porque rompiendo las puertas de la frontera de Barrio Chino y saltando al interior, agresividad ha habido”.
El líder del SUP en Melilla, por último, insistió en la necesidad de que Marruecos contrarreste estos saltos. “El tema es que con las nuevas relaciones con Marruecos, se supone que iban a contrarrestar más las entradas pero, al final, parece que no, que la presión es muy fuerte”.