Cádiz
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Jesús Casas fue protagonista esta semana en la pequeña pantalla. El gaditano acudió al ‘Submarino Amarillo’, programa de Onda Cádiz TV para ser entrevistado por Nacho Limón y ahí abordó muchos temas.
Para empezar señaló: «Ha sido una etapa inolvidable, pero ahora toca disfrutar del día a día y pensar en el futuro», al recordar su experiencia en la selección española.
Eso sí, sin olvidar sus raíces: «La ventaja es que esto me llegó tarde. Cuando te llega pronto el éxito se te nubla un poco la perspectiva. Yo hasta los 39 años estaba en el barro, en una época muy bonita también».
Y de inmediato empezó a responder a las preguntas planteadas sobre el Cádiz CF. La primera,
el cambio de denominación del Cádiz B, ahora Cádiz CF Mirandilla.
Y Jesús Casas, perfecto conocedor de la cantera cadista, respondió: «Son cuestiones de márketing. Si aquí le seguimos diciendo Plaza de Toros, el Cádiz B seguirá siendo el Cádiz B. No sé si con el paso de los años se le llamará Cádiz CF Mirandilla».
A fin de cuentas, el Cádiz CF y su cantera siempre serán muy especiales para él: «Cuando estás fuera echas más de menos el club, la ciudad… Le das más valor».
Recordando su última experiencia en el club de La Tacita de Plata señaló: «Juan Carlos Cordero insistió mucho para que entrara en el club, pero sabía que en cualquier momento puedo marcharme y así se firma.
Me fui al Watford con Javi Gracia. Y de ahí a la selección española con Luis Enrique. Ya lo teníamos hablado. A quien menos le gustó fue a mi hija porque ella quería vivir en Inglaterra».
Por eso Jesús Casas no duda en señalar: «El año de la rúa del triplete con el Barça fue chulo. Pero… ¿puedes creer que (y se me pone la piel de gallina) que la cambiaría por una rúa por Cádiz? La hubiera disfrutado mucho más con el Cádiz CF».
La importancia de acertar con los fichajes
A la hora de analizar la temporada del Cádiz CF, Jesús Casas se detiene en la consecución de la permanencia. «Aunque el presidente dijo otra cosa, a día de hoy la permanencia es un auténtico logro, aunque se consiga al final, pero con los presupuestos que se manejan… Ojalá el club siga creciendo y llegue un día que la permanencia sea una obligación y el Cádiz CF aspire a cotas más altas. Estar tres años seguidos en Primera y compitiendo contra los grandes es para celebrarlo. Es bueno para el club, la ciudad… Que sea por muchos años», señaló.
Y valoró el éxito conseguido con tanto sufrimiento:
«En la primera temporada no se disfrutó tanto. Ahora tocó hacerlo con agonía, también por desgracia, pero volvimos a recuperar el cariño del país por ser el típico equipo que se salva al final. Yo espero disfrutarlo menos porque sería señal de sufrir menos».
Ahora bien, no dejó de reconocer que era necesario tomar una decisión impopular en un determinado momento porque «Álvaro Cervera es el mejor entrenador de la historia del Cádiz CF en cuanto resultados, aunque por diversas circunstancias y por desgaste, las sensaciones no eran las mismas. El cese incluso pudo llegar un poco antes. Ahora es fácil decirlo. Por desgracia creo que era necesario porque había mucho desgaste con plantilla y club. Tenía demasiados frentes abiertos».
Una situación que llegó provocada en buena medida por la planificación deportiva de la pasada temporada. «Hay que intentar amarrar bien la plantilla en el mercado estival. No es normal tener tanto acierto en el mercado de invierno como tuvo el Cádiz CF. Siempre no va a ocurrir lo mismo».
Y Jesús Casas puso nombres y ejemplos: «El Cádiz CF tiene que ser un club vendedor. Hizo apuestas arriesgadas en verano como las de
Arzamendia, Haroyan, Martín Calderón, Tomás Alarcón… Después en el mes de enero al no salir bien el mercado de verano llegaron jugadores contrastados como
Luis Hernández, Rubén Alcaraz, Liucas Pérez… Aunque de cara al futuro tiene menos recorrido para hacer negocio y seguir creciendo a nivel económico con posibles ventas».
«El mercado cada vez tarda más porque puedes firmar hasta el 31 de agosto y las negociaciones se alargan. El Cádiz CF, por desgracia, no es de los equipos que llegan más sobrados. Al final suele haber muchos movimientos», aclaró. Y también advirtió: «La próxima temporada será complicada porque suben equipos como Valladolid y Almería. Creo que estaremos luchando por la permanencia y habrá que sudar para conseguirla».
Del mismo modo hizo un inciso para apuntar que
José Mari tiene todas las papeletas para ser entrenador en el futuro.«A José Mari le viene de serie. Está totalmente capacitado y pocos dudan que hará carrera como entrenador cuando se retire».
Un cadista en las altas esferas
Por último
Jesús Casas hizo un repaso a su trayectoria profesional. Empezó valorando su salida de la selección española y su relación con el seleccionador Luis Enrique. «La decisión no ha sido unilateral. Las dos partes vimos que la salida era lo mejor. No hay mucho más que hablar en este sentido», puntualizó
No dudó en agradecer al técniso asturiano la oportunidad que en su día le dio: «En el Barça-Madrid del primer año me di cuenta en el lugar que estaba. Fue en descanso y en el vestuario cuando me dio el ‘chispazo’».
Porque estar en un vestuario con los mejores jugadores del mundo no puede decirlo cualquier persona. «La primera vez que me cruzo con Leo Messi fue en el ascensor de la ciudad deportiva e iba junto a Luis Suárez. Y yo era el ‘pringao’ de Cádiz. Le dices buenos días y listo. Son chavales, pero al momento te choca», detalló.
«De todo me queda la final de la Champions en Berlín en mi primer año, pero la mayor regularidad la consigues en LaLiga, que es más complicada y debería reconocerse más», añadió.
Sobre el futuro Jesus Casas fue claro: «Si algo tiene que pasar, pasará. Lo importante es ser feliz y disfrutar lo que uno tiene. Aunque a nivel profesional y económico el Barça y la selección me han dado algo increíble, mucho más feliz personalmente me he encontrado entrenando al Balón Juvenil el año que subimos o entrenando al Deportes Romero».
Y además el gaditano apostilló: «He tenido alguna opción de entrenar, pero no se han dado las circunstancias. Estoy muy cerca de irme muy lejos, pero tienen que darse circunstancias económicas y personales para dar ese paso. Ya se irá viendo».
