El Grupo de los Siete comenzó una reunión el jueves bajo la sombra de la inflación y las repercusiones de la invasión rusa de Ucrania, y en la que la secretaria del Tesoro estadounidense Janet Yellen advirtió que el mundo vive “una situación económica sumamente difícil”.
Los ministros de economía del G7 — integrado por Japón, Alemania, Francia, Estados Unidos, Gran Bretaña, Italia y Canadá— enfrentan desafíos como la crisis de refugiados, la inseguridad alimentaria, el cambio climático y las ramificaciones de la pandemia.
Yellen advirtió ante los ministros reunidos en Koenigswinter, Alemania, que las sanciones impuestas a Rusia podrían causar dificultades económicas a Estados Unidos y sus aliados, como por ejemplo nuevas presiones inflacionarias.
El riesgo de una mayor inflación es que podría causar una desaceleración económica, indicio de que la invasión rusa de Ucrania podría tener repercusiones mucho más allá del frente de batalla.
Yellen destacó “no solamente las interrupciones en las cadenas de suministro que hemos visto, sino a medida que continúa la guerra y continúan las sanciones, la economía mundial enfrenta el riesgo de más presiones inflacionarias”.
El ministro de Hacienda de Alemania, Christian Lindner, anfitrión del evento, dijo a reporteros previo al encuentro que Ucrania probablemente necesitará “miles de millones de euros” en los próximos meses.
Más tarde, Lindner indicó que el primer ministro de Ucrania se dirigió al encuentro por video y que los ministros están en contacto con el ministro de Hacienda de Ucrania, que también está participando por teleconferencia. “Actualmente estamos recibiendo varias promesas de dinero”, expresó Lindner a reporteros.
Alemania prometió dar 1.000 millones de euros y espera “más avances” durante las reuniones, añadió.
Otro tema en el debate fueron los precios al consumidor. Yellen indicó que las naciones estaban “perdiendo algunos factores” de deflación y añadió: “Estamos posiblemente entrando a una situación en que los precios de los bienes por lo general descenderán a un ritmo menor de lo que han hecho históricamente”.
Lindner añadió: “Se necesitan decisiones claras para no dejar que la inflación se convierta en un fenómeno pernicioso a largo plazo y para que podamos superarla rápidamente”.
La inseguridad alimentaria era otro tema importante, incluso antes del inicio de la reunión. El miércoles, Estados Unidos, varios bancos de desarrollo y otras agrupaciones develaron un plan multimillonario para encarar los peligros inherentes a la frágil economía mundial.
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Jordans reportó desde Berlín. El periodista de The Associated Press Geir Moulson en Berlín contribuyó para este despacho