A finales de 2021, los NFT y el metaverso eran los temas de mayor interés en el mercado de las criptomonedas. Los tokens no fungibles siguieron siendo el último bastión del mercado, con el mercado OpenSea rompiendo su récord de volumen de transacciones mensuales y la continua apreciación de los artículos de las colecciones de NFT más populares del espacio, como Bored Ape Yacht Club y CryptoPunks.
Los tokens de los principales metaversos descentralizados ya operaban justo por debajo de sus máximos históricos a finales de diciembre. Y en enero, aunque ya estaban en tendencia a la baja, seguían superando a las acciones de las empresas tecnológicas dedicadas al desarrollo de software y hardware para estos nuevos entornos digitales inmersivos.
En la actualidad, el nivel de interés popular global por ambos términos, según Google Trends, está en sus niveles más bajos desde finales de octubre del año pasado. Un momento en el que, no por casualidad, el metaverso y los NFTs extrapolaron los límites de la comunidad de criptomonedas, y se convirtieron en temas populares a nivel mundial.
Todo comenzó el 28 de octubre, cuando cuando Mark Zuckerberg, CEO de la entonces empresa Facebook, anunció que la compañía pasaría a llamarse Meta y que gran parte de sus esfuerzos a partir de entonces se orientarían al desarrollo de productos y servicios centrados en el metaverso. Estos entornos virtuales emergentes serían la siguiente etapa de Internet, dijo.
Según Zuckerberg -y muchos se embarcaron en este viaje con él en su momento- las personas dejarían de interactuar entre sí a través de las pantallas de los dispositivos digitales y tendrían sus personalidades virtuales trasladadas a la web en forma de avatares.
Los críticos de Facebook reaccionaron negativamente al anuncio, pero el sector de las criptomonedas fue el primero en beneficiarse de las renovadas intenciones de la empresa y su líder. Inmediatamente, los dos principales tokens del metaverso descentralizado –Decentraland (MANA) y The Sandbox (SAND)– iniciaron un ascenso hacia nuevos máximos históricos impulsados mucho más por la irracionalidad del mercado que por razones concretas y objetivas. En la secuencia, otros protocolos también se beneficiaron del repentino y creciente interés por el tema, como Gala Games (GALA), Iluvium (ILV) y WEMIX.
Los NFT ya habían experimentado un primer aumento de interés y entusiasmo a finales de agosto y septiembre. Por aquel entonces, el Bored Ape Yacht Club se consolidó como un fenómeno cultural más allá de la frontera de la comunidad de criptomonedas con una subasta en Sotheby’s que recaudó 130 millones de libras. En su momento, los NFT de la colección alcanzaron precios récord gracias a la adhesión de personalidades del universo deportivo y de la industria del entretenimiento al club de los Bored Ape.
Sin embargo, el auge del metaverso ha ido acompañado de una renovación del interés por los NFT, ya que la esencia de los tokens no fungibles -en efecto, certificados de propiedad digital registrados en redes blockchain públicas y transparentes- es fundamental para la plena realización del supuesto potencial creativo y económico de estos nuevos entornos virtuales digitales.
Una semana después del anuncio de Zuckerberg, el interés combinado por los NFT y el metaverso alcanzó su punto máximo, según Google Trends. A partir de ahí, los NFT siguieron aumentando. El punto álgido de la atención del público se produjo en la semana entre el 16 y el 22 de enero, impulsado por la renovación de los récords de precios de Bored Apes, CryptoPunks y CloneX y el lanzamiento de nuevas colecciones e incluso de un mercado para competir con el líder OpenSea. Las búsquedas del metaverso se han mantenido relativamente estables desde principios de noviembre, pero a un nivel mucho más bajo.
Búsqueda de NFT y metaverso en los últimos 12 meses. Fuente: Google Trends
En los últimos días de enero, se empieza a observar un fuerte descenso del interés por los NFT, cuyo efecto se nota también en las búsquedas del metaverso en Google. Hoy en día, el interés tanto por el metaverso como por los NFT se encuentra en niveles pre-Meta, según Google Trends.
En un artículo publicado en Forbes la semana pasada, el experto en medios de comunicación y entretenimiento de la revista, Paul Tassi, se pregunta qué futuro le espera al supuesto futuro de Internet, dado que sus dos principales vectores parecen estar quedándose en el camino, al menos de cara al gran público:
“Puede que la tecnología blockchain y todo lo que genera no vaya a ninguna parte, pero todas las predicciones sobre que los NFT forman parte de un futuro inevitable y que el metaverso es el nacimiento de la web 3.0 parecen… exageradas, por decirlo de alguna manera. No me extrañaría que estos conceptos volvieran más adelante con nuevos nombres para estar más de actualidad, pero por ahora, el interés por ambos está disminuyendo claramente, y me pregunto qué pasará con los millones de NFT que se tienen cuando la especulación en este mercado ya no esté en su punto álgido. Si seguimos por este camino, estamos a punto de descubrirlo”.
A pesar del evidente declive del mercado de los NFT y de los deslucidos experimentos iniciales en el metaverso -ya sea descentralizado o centralizado-, los gigantes tecnológicos siguen desarrollando productos y soluciones para los NFT con un enfoque en la Web 3.0.
Zuckerberg volvió a los titulares el miércoles 16 para anunciar que Instagram integrará los NFT en la plataforma. Y Spotify acaba de abrir dos ofertas de trabajo centradas en las tecnologías emergentes y en la Web3, según informa Cointelegraph.
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