Neptune: el misil con el que Ucrania asegura haber dañado el buque insignia ruso
Rusia ha sufrido una de las pérdidas materiales más significativas desde que el pasado 24 febrero inició su invasión a Ucrania. El buque insignia de la flota de Moscú en el Mar Negro, bautizado como ‘Moskva’, se ha visto gravemente dañado.
El ministerio de Defensa de Rusia ha detallado que esos importantes desperfectos se explican porque “debido a un incendio, hubo municiones que explotaron a bordo”. Sin embargo, la versión de Ucrania es radicalmente diferente.
El gobernador de Odesa, Maxim Marchenko, ha resaltado que los causantes de esos daños en el buque insignia ruso han sido “los misiles Neptune que protegen el Mar Negro” que, según él, “provocaron importantes daños en este buque ruso”.
Una modificación de un misil ruso
Tal y como informa La Razón, el misil Neptune es una modificación ucraniana que ha sido desarrollada por la Oficina de Diseño Luch tomando como base el misil de crucero ruso antibuque Kh-35.
Sus características generales son similares a las del Kh-35U, pero el Neptune cuenta con un cuerpo más largo con capacidad para una mayor cantidad de combustible, un refuerzo más grande y algunas otras modificaciones.
Neptune se anunció por primera vez en 2013, aunque las primeras pruebas no tuvieron lugar hasta el año 2016, cuando este misil modificado aún no contaba con sistemas de orientación. Su puesta en servicio se produjo hace poco más de un año, en marzo de 2021.
El misil tiene un alcance de 280 kilómetros y puede ser lanzado desde plataformas navales, terrestres y aéreas. Su diseño está pensado para que puedan ser situados en contenedores de transporte y lanzamiento que tengan unas dimensiones de 5.300 × 600 × 600 milímetros. La longitud total del Neptune con un acelerador es de 5.050 milímetros.