Supongamos que no conoces nada de bitcoin. Estás en tu trabajo, pensando quizá en el próximo día de cobro, y alguien te ofrece una propina. En principio, pensarás en el dinero extra que eso te supondrá. Solo hay un detalle: la propina sería en bitcoin (BTC), algo de lo que quizá hayas escuchado pero no conoces realmente. ¿Qué haces?
Ante este dilema se encontró recientemente una mesera en un café de Palermo, Buenos Aires; que recibió una propina de 20 dólares en BTC a través de la red de canales de pago Lightning Network. En un video que ya se hizo viral, puede verse a MAD Cripto, Mateo (alias @mattunchi en Twitter), pagando la propina a la mesera durante su visita a la capital argentina.
Pero lo que vino después de que ella recibiera dicha propina es lo que realmente viralizó el asunto. Una vez recibida la transacción en su wallet recién instalada, la chica preguntó inocente: “¿Y ahora qué hago con esto?”. La respuesta la dejó a ella y a todo Twitter fríos: “lo guardás 20 años”.
La voz no era la de @mattunchi, trader y analista de mercados. Era @CryptoFLP, Paul, quien con tan breve sentencia resumía para la mesera muy nueva en el mundo de las criptomonedas, la gran consigna bitcoiner: bitcoin hay que guardarlo por mucho tiempo para sacarle el mayor provecho. Lo que conocemos como hodl.
El propio Paul publicó luego en Twitter que la chica lo contactó para disipar algunas dudas sobre bitcoin, pensando en el futuro. Luego ella misma apareció en Twitter y le pusimos nombre a la hasta entonces mesera anónima: Daniela.
Hay quienes incluso ven más que un simple desacierto, como otros. David Bressan, por ejemplo, lo calificó como un “paternalismo condescendiente y clasista de la actitud” que “solo es superado por el de los forros que le festejan los de los 20 años”, en referencia a quienes celebraban la acción.
Porque sí los hubo, y también bastantes…
“Quisieron decirme que no haga lo que hacen todos”
A diferencia de lo que muchos pensaron, Daniela no solo estaba agradecida (según las capturas que publicó el tuitero y sus propios mensajes) sino que además le gustaría entender mejor. Hasta una beca para un curso sobre bitcoin le terminaron otorgando, además de la propina en BTC (y otra en pesos argentinos).
En Instagram, Daniela calló las críticas e incluso se refirió al comentario de los 20 años de plazo a guardar los satoshis que le dieron: “Fue una manera de decir, normalmente cualquiera cambiaría la moneda y gastaría la plata. Ellos quisieron decirme que no haga lo que hacen todos”.
Daniela lo tomó como un consejo de inversión, o incluso como una forma de enseñarle que, en el largo plazo, bitcoin ofrece más si lo guardas que si lo gastas inmediatamente.
Incluso, según una nota publicada por el diario local La Nación, Daniela primero se interesó en el tema al escucharlos hablar sobre bitcoin. Al menos, eso aseguró Mateo, quien además reiteró que los 20 dólares en BTC no fueron la única propina que recibió Daniela esa noche: también le dieron pesos pero a él particularmente le gusta dar BTC “ya que así incentiva a la gente a aprender y, más que nada, a usarlo”.
¿Por qué no “hacer lo que hacen todos”?
Hay que decirlo: en parte, algunas de las críticas parten de apreciaciones razonables. Especialmente, las que apuntan a que, para alguien que vive al día y necesita cada peso que le llegue, es difícil pedirle que guarde a largo plazo un activo que además desconoce. Así, de entrada.
Yo mismo he pasado por la dificultad de “apilar sats” mientras intento seguir mi vida, llevando el pan a la casa, garantizando actividades educativas y recreativas para mi hija, ayudando a familiares. En fin, cubriendo los gastos del día a día.
Sin embargo, si desmenuzamos más la recomendación, encontramos mucho más que la circunstancia. Históricamente, el valor de mercado de bitcoin no ha hecho sino subir, incluso si tomamos en cuenta la volatilidad en el corto plazo, en rangos temporales amplios, BTC es indudablemente una inversión muy rentable.
Los ciclos de mercado de bitcoin, además, han estado hasta el momento claramente definidos. Y esta es una de sus características intrínsecas: cada cuatro años, aproximadamente, se reduce la cantidad de monedas que entran en circulación. Es decir, lo inverso a las políticas inflacionarias y de emisión monetaria de los gobiernos y su dinero fíat.
Esos plazos de cuatro años han sido acompañados por nuevos máximos históricos de precio, sin excepción. Así que… ¿20 años? Te están recomendando guardar por 4 o 5 ciclos de bitcoin. Y si la historia ha sido esa, ¿por qué esperar algo distinto para el futuro?
Descargo de responsabilidad: Los puntos de vista y opiniones expresadas en este artículo pertenecen a su autor y no necesariamente reflejan aquellas de CriptoNoticias.