CIUDAD DE MÉXICO (apro).– Amnistía Internacional denunció que, a lo largo del año, el gobierno de Andrés Manuel López Obrador realizó acciones para desacreditar y reprimir a quienes ejercen su derecho a la libertad de expresión y de prensa.
También criticó la forma en que ha estigmatizado y reprimido el movimiento feminista que a nivel Latinoamérica califica como “vibrante”, y que cobró fuerza en 2020 y lo que va del 2021.
El informe de esta organización internacional cubre varios temas, entre ellos el trato que se le ha dado al covid-19, el feminicidio y la violación de los derechos humanos de los migrantes.
Destaca que decenas de miles de personas, en su mayoría de Guatemala, Haití, Honduras y Venezuela, que huyeron de violaciones de derechos humanos relacionadas con la violencia, la desigualdad y el cambio climático, fueron presa de detenciones, devoluciones sumarias ilegítimas, extorsión, discriminación racial y violencia de género por diversos gobiernos, entre ellos el de México.
En su informe 2021/22, Amnistía Internacional dio a conocer la situación de los derechos humanos alrededor del mundo en 2021. En él señala que, ante las políticas públicas para la recuperación ante los estragos de la pandemia por covid-19 quedaron en promesas y que hubo desigualdad y acaparamiento en el acceso a las vacunas.
También señala que la violencia de género sigue siendo uno de los principales motivos de preocupación en toda la región de América, donde las medidas para proteger a las mujeres y las niñas son insuficientes, y las investigaciones sobre la violencia de género intrafamiliar, las violaciones y los feminicidios fueron a menudo deficientes.
“México registró tres mil 716 homicidios de mujeres en 2021, de los que 969 fueron investigados como feminicidios, mientras las fuerzas de seguridad mexicanas usaban fuerza excesiva, detenciones arbitrarias y la violencia sexual contra las mujeres que protestaban”, destaca el informe de Amnistía que dio a conocer este martes.
Sobre México, la organización destacó los altos índices de violencia e inseguridad que presenta el país. Además, hizo mención de las varias declaraciones que ha realizado el gobierno que encabeza Andrés Manuel López Obrador en contra de sociedad civil, medios, defensores de derechos humanos y académicos, así como de mujeres en protesta por la violencia de género.
“El gobierno siguió realizando declaraciones públicas en las que atacaba a organizaciones de la sociedad civil y medios de comunicación”, son las palabras con que inicia el reporte.
Las instituciones de seguridad pública como las policías municipales, estatales y federales (Ejército Mexicano, Marina y Guardia Nacional), fueron referidas por haber cometido abusos de autoridad. El Instituto Nacional de Migración (INM) también fue señalado por su actuar en el control de las protestas y caravanas de inmigrantes a través del territorio nacional.
La situación sobre la violencia de género en contra de mujeres y niñas se abordó con relevancia. Los casos denunciados y los feminicidios fueron elevados, de igual forma las investigaciones y acciones empleadas por las autoridades fueron insuficientes, según indicó el informe. En contraste, destacó el papel de la Suprema Corte de Justicia de la Nación para declarar inconstitucional la penalización del aborto (específicamente en Coahuila).
Los temas incluidos fueron: desapariciones forzadas e impunidad, homicidios ilegítimos, detención y reclusión arbitrarias, tortura y otros malos tratos, libertad de expresión y de reunión, violencia contra mujeres y niñas, defensores y defensoras de los derechos humanos, derecho a la salud, derechos sexuales y reproductivos, derechos de las personas refugiadas y migrantes, derechos de lesbianas, gays, bisexuales, transgénero e intersexuales (LGBTI), derechos de los pueblos indígenas y la actuación deficiente contra la crisis climática.
Algunos de los puntos que más destacó el documento fueron la falta de actuación de las instituciones tanto judiciales como legislativas para mejorar las condiciones de seguridad y mitigar la violencia que vive la ciudadanía; el involucramiento de fuerzas del Estado en casos de desapariciones forzadas; las detenciones arbitrarias y el exceso en el uso de la fuerza (recordó el caso de Victoria Salazar, salvadoreña asesinada por policías en Quintana Roo).
Respecto a los homicidios de mujeres, el reporte hace hincapié en la alta tasa registrada durante el año con especial enfoque en el Valle de México. A nivel nacional hay carpetas de investigación por tres mil 427 casos, de los cuales 887 fueron abordados como feminicidios.
“En el Estado de México, donde tuvo lugar el mayor número de feminicidios de 2021, las investigaciones penales sobre estos delitos presentaban deficiencias graves. Las autoridades no custodiaban adecuadamente las pruebas recopiladas ni examinaban todas las líneas de investigación aplicando correctamente una perspectiva de género”, se lee.
En el tema de libertad de expresión, los señalamientos hacia el gobierno de López Obrador y sus instituciones, el informe de Amnistía Internacional señala que las acciones y declaraciones fueron valoradas como acciones para desacreditar y reprimir a quienes ejercen su derecho a la libertad de expresión y de prensa.
“Las autoridades siguieron estigmatizando y reprimiendo las protestas feministas y haciendo un uso indebido del sistema de justicia penal para disuadir de su participación a las personas. Pocos días antes de las manifestaciones del Día Internacional de la Mujer, el presidente y otras autoridades calificaron las protestas de violentas”, aseguró el informe.
“Vibrante” movimiento feminista
Sobre el movimiento feminista de América Latina lo califica como “vibrante” y señala que siguió cobrando fuerza sin desmayo desde que Argentina legalizó el aborto a finales de 2020, mientras que en México la Suprema Corte declaró inconstitucional la criminalización del aborto en septiembre de 2021 y, en febrero de 2022, la Corte Constitucional de Colombia despenalizó el aborto en las primeras 24 semanas de embarazo.
“Desde Argentina hasta Colombia, la marea verde ha generado un impulso incontenible y ha demostrado que es posible el cambio incluso en situaciones aparentemente desesperadas. Las activistas feministas de las Américas son una inspiración para que, en todo el mundo, no dejemos nunca de defender los derechos humanos”, concluyó Erika Guevara Rosas.