El curling es un deporte olímpico de invierno que se juega sobre una pista rectangular de hielo donde se enfrentan dos equipos de cuatro o dos integrantes, dependiendo las modalidades: dobles mixtos o cuatro integrantes. Este deporte se juega a 10 u ocho ends (rondas) donde cada equipo lanza una piedra de granito de 20 kg hacia el objetivo conocido como casa. El equipo que tenga más piedras dentro de la casa se lleva el end.
Ismael Abreu, comenzó a practicar el curling como un hobby, sin imaginar que se convertiría en una terapia para él y lo realizaría de forma profesional, para cumplir el sueño de representar a México a nivel internacional. En entrevista con Publisport, el deportista azteca contó detalles de este deporte que practica en la modalidad mixta junto a Estefana Quintero.
¿Cómo descubriste el curling?
– La primera vez que lo conocí fue en las Olimpiadas de Sochi 2014 y dije ‘oye, está divertidísimo este deporte, ojalá algún día tenga la oportunidad de practicarlo’, pero no fue hasta que me fui a vivir a Canadá que tuve esta oportunidad. Es ahí cuando empieza esta aventura, hace seis años.
¿Por qué te mudaste a Canadá?
– Mi esposa (Fernanda Ordiales) y yo nos fuimos de intercambio en la universidad y nos quedó esa espinita de volver a vivir en el extranjero. Empezamos a ver opciones de trabajo en otros lugares e intentamos en Canadá. Mi esposa se vino a estudiar, yo me vengo a trabajar. Conocí a un mexicano en el metro, nos vio perdidos y me ofrece trabajo en la construcción. Yo estudié arquitectura y pensé en la construcción como encargado de obra, pero no, estuve un año como albañil. Después, conseguí un trabajo en un despacho de arquitectura y nos empezamos a establecer mejor. Paralelo a esto, cuando llego acá tuve la oportunidad de comenzar a practicar el curling en un club. Fui a practicarlo con mi esposa, nos dijeron que había una liga y podías competir contra gente de tu mismo nivel.
¿En qué momento pasaste de ser un deportista amateur a representar a México?
– Estefana (compañera de selección) me dijo que había una federación de curling y que estaban buscando equipos. A partir de ahí, comencé a competir en el equipo de hombres 4 contra 4, primero; así fue como empezamos. Se juntaron los dos combinados, de hombres y mujeres, pero fue complicado. El primer certamen oficial que participé con México fue cuando competimos en un torneo que se llama Americas Challenge, en Minnesota. El equipo de mujeres sólo había estado junto una vez y el equipo de hombres se conoció allá. Yo estaba muy novato, pero ahí decidí enfocarme más. Estados Unidos nos dio una cátedra y dije ‘si voy a competir por México necesito ponerme las pilas, porque el nivel que traen otros equipos es muy alto, entonces no va a haber forma de que les ganemos si no practicas más’. En este torneo conseguimos el boleto a Finlandia, el último clasificatorio para ir al mundial en marzo de 2020.
¿La Federación Mexicana de Curling los apoya?
– Cuando fuimos a Finlandia todo había sido financiado por los jugadores. Nos dieron los uniformes y una ayuda mínima para el viaje. Ahí me puse un límite y dije ‘a ver, a qué le estamos tirando y qué queremos lograr, porque tengo una vida personal y estar gastando tanto en ir a estos viajes, sobre todo al de Finlandia, es pesado’. Acudimos a la Federación para ver cómo trabajar y hacer crecer este proyecto. Queremos involucrar patrocinadores, que sean nuestros socios en el crecimiento de este deporte.
¿Tu familia te apoya en esta aventura?
– Mis papás están super emocionados. Ahorita en los Juegos de Invierno estuve narrando y estuvieron conectados escuchándome. Mi esposa, la verdad mis respetos, me apoya mucho. Desde el día uno me dijo ‘este es un sueño que tienes’. Hay veces que hemos estado apretados de lana y me dice ‘lánzate, no sabemos cuándo vas a volver a tener la oportunidad, yo te apoyo y cuando regreses ya veremos qué onda’. Es algo padrísimo, porque te ayuda a sentirte cómodo compitiendo al saber que tienes este apoyo de tus seres más cercanos.
¿Qué consideras que le falta al curling para ser un deporte más popular en México?
– Hace falta más difusión y lugares dónde practicarlo, porque seguro hay gente que tiene la inquietud y no lo practica porque no hay dónde. En México estamos como a cinco o 10 años de tener un proyecto en forma. Ya hay una pista de curling en Atizapán, Estado de México.