Los algoritmos pueden cambiar la vida de las personas, asegura el emprendedor chileno Álvaro Echeverría.
Lo comprobó cuando era académico y ayudó con ciencia de datos y machine learning a volver más eficientes las rutas de los cuerpos de bomberos de Santiago, y así salvar más vidas.
Aplicados a los negocios, explica, pueden cambiar economías enteras. Específicamente y en su caso, Álvaro ha hecho de estas ciencias un negocio muy redituable al modernizar la manera en la que los productos están llegando a las puertas de nuestras casas.
“Aprendí que la logística se puede abordar desde un punto de vista muy matemático que puede ayudar y tiene un impacto en la vida de las personas”, cuenta el emprendedor, fundador de la startup Simpliroute.
Simpliroute es una plataforma de optimización de inteligencia logística que ayuda a empresas de transporte, retail, consumo masivo y en general a cualquier empresa para realizar entregas dentro de una ciudad de manera eficiente.
Según estimaciones de Álvaro, al utilizar data de flujos de tráfico en calles e inteligencia artificial, el uso de la plataforma les representa a empresas una reducción del 30 por ciento de sus costos logísticos a la vez que se mejora la experiencia de los clientes, lo que permite a las empresas reducir en 10 por ciento el tamaño de sus flotillas.
“Resolvemos el problema de cómo hacer bien las entregas. Pensemos en un cliente como Liverpool que tiene que hacer muchas entregas dentro de una ciudad y tiene muchos vehículos. Ayudamos a que las haga sin errores, a definir con cuántos vehículos y en qué orden puede hacerlas para reducir los costos y llegar a tiempo para el cliente final”, explica.
Al momento esta plataforma ayuda a más de mil empresas en 26 países a realizar sus entregas a clientes finales, representando el 94 por ciento de ellas mypimes.
Para las pequeñas empresas la solución les representa la capacidad de hacer eficientes sus entregas sin invertir una gran cantidad de dinero y tiempo.
Por su parte a los grandes corporativos les permite coordinar flotillas de miles de vehículos desde un solo punto y comenzar ofrecer así servicios de delivery “same day”, concepto que hasta hace poco estaba vedado para grandes empresas tecnológicas, como Rappi, Uber o Didi.
Incluso –comparte– el 85 por ciento de los clientes de Simpliroute ya están ofreciendo entregas el mismo día, sin importar su tamaño o rubro.
Entre el portafolio de clientes grandes se encuentran marcas como Walmart, Avon, Liverpool o Falabella Soriana así como cientos de micro y pequeñas empresas así como startups.
Con estas credenciales al momento la plataforma cuenta ya con oficinas en Estados Unidos, Chile y Brasil y acumula inversiones por 11.5 millones de dólares.
Según explica Álvaro, a pesar de la existencia de plataformas como Google Maps o Waze, la buena aceptación de Simpliroute se debe a la ausencia de una herramienta tecnológica especializada en logística.
“Para hacer sus entregas las empresas no tienen nada, lo hacen viendo Google Maps o planeando sus rutas con mapas y dividiéndolas por distrito, sin herramientas para los conductores”, dice.
La penetración de tecnología compleja en el proceso logístico –explica– resulta de extrema importancia actualmente ante el ascenso del e-commerce. Especialmente en tiempos de pandemia, en los que las personas no pudieron salir de casa y se hicieron normales las entregas “same day” y “next day”.
Sin expertise en el desarrollo de software, las empresas de retail se vieron enfrentadas a un reto de suministro sobre demanda no vista antes, consumidores exigentes, y patrones de tráfico erráticos. Todo ello con tecnología obsoleta.
“Se volvió muy desafiante para las empresas poder decirte que van a llegar a las tres o cuatro de la tarde porque cada vez hay menos predictibilidad en los flujos de tráfico cuando están cambiando tanto las condiciones de la calle con el desconfinamiento”.
Por ejemplo, de acuerdo a una reciente encuesta entre compradores online mexicanos realizada por PayPal, durante la pandemia el 11% de ellos hicieron una compra diaria, cuando antes del 2020 eran el 6.3%. Según estos datos las compras online se convirtieron en un evento cotidiano y se espera que esta tendencia continúe.
Álvaro por su parte cuenta que previo a la pandemia se estimaba que apenas el 7% de las ventas del retail en México se hacían vía online. Esta proporción se ubica hoy en 25 por ciento.
“La pandemia trajo un crecimiento del ecommerce absurdamente grande. Todas las empresas tuvieron que hacer volúmenes de repartos que no estaban haciendo antes, imagínate crecer tres veces tu canal digital de un día para otro, obviamente no iba a ser eficiente.
“Es un mercado en el que no puedes fallar, el cliente quiere cada vez más entregas, más flexibilidad, y sin poner procesos tecnológicos va a ser muy difícil satisfacerlo. Es ahí donde una herramienta como la nuestra se hace indispensable”.
PASILLOS POR AUTOPISTAS
Álvaro Echeverría es un ingeniero en datos por la Universidad de Chile.
Según cuenta, la idea embrionaria para Simpliroute nació desde 2010 cuando estudió el diseño de un nuevo sistema de despacho basado en optimización de caminos más cortos para el Cuerpo de Bomberos de Santiago. En él incorporó el análisis de los tiempos de respuestas y se dedicó a mejorar el desempeño, con lo que se redujo en 40% el tiempo de traslado a emergencias.
Conforme fue avanzando en su carrera profesional Álvaro se fue especializando en entregar soluciones e información para mejorar la experiencia en la industria del retail dentro de la empresa de análisis de data y software basada en San Francisco, Scopix.
Pasado el tiempo Álvaro decidió hacer uso de este background para lanzar junto a su socio y egresado de Stanford, Eyal Shats, su propia startup basada en soluciones de rutas y retail, y fundó Simpliroute en 2014.
“Me dedicaba a hacer algoritmos de lo que sea, utilizábamos video analytics para hacer la predicción de por ejemplo de cuántas personas iban a haber en las filas y cuántas cajas había que abrir.
“Para Simpliroute retomamos la idea base de que algoritmos y ruteo pueden impactar la vida de la gente y lo llevamos al mundo empresarial, donde naturalmente figuró el transporte y el retail”.
Así, Álvaro pasó de resolver el tráfico de los anaqueles por el de las calles.
La plataforma está basada en un algoritmo complejo de predicción de tráfico albergado en la nube y creado desde cero por Álvaro. Este recolecta data de diferentes bases de datos alimentadas por fuentes como Google o los GPS de los clientes de Simpliroute.
De acuerdo con Álvaro, esta tecnología propietaria predice en 85% de las veces el tráfico con diferencia de apenas 5 minutos de la realidad.
La solución comenzó en Chile y fue aceptada rápidamente por la incubadora global de negocios 500 Startups en su versión estadounidense, en la que logró juntar una ronda semilla por 100 mil dólares. Esto le permitió comenzar operaciones en México en 2019.
Según refiere Álvaro, en aquel año la tecnología de datos aplicada a la logística apenas era un buen deseo dentro de la industria, con pocas empresas fuera del big tech preocupándose por hacer más eficientes los procesos.
Acto seguido en 2020 la pandemia fue una realidad y lo demás fue historia. Simpliroute pasó de contabilizar 250 clientes a inicio de ese año a un total de mil para 2022.
Sólo en México durante 2021 se realizaron 17 millones de entregas gracias al uso de su software cuadruplicando así los datos del 2020, las cuales representaron el 37% de todas las habidas en Latinoamérica.
“Con el crecimiento de México y vino la explosión y la evolución de la plataforma pasamos al cliente corporativo durante 2019, pero la pandemia 2020 cambió todo hacia bien para nosotros.
“Triplicamos nuestras ventas en un año, el mercado se agrandó y se aceleró, entonces las empresas que no estaban comprando el producto empezaron a hacerlo para poder salvarse”.
Con miras al 2022 se espera aumentar el número de clientes en 30% derivado de estas tendencias.
Así, en el corto plazo –adelanta Álvaro– la startup lanzará una ronda B por al menos 30 millones de dólares para incrementar su presencia comercial, especialmente en México.
“Hoy estamos sólo en la última milla pero estamos buscando movernos a través de toda la cadena logística y a crear nuevas soluciones en otros apartados de ella, tanto en la bodega, como el puerto y a través de todo el proceso.
“Pero por lo pronto el objetivo es terminar de consolidar el mercado mexicano que es nuestro principal mercado, donde más crecemos y más clientes tenemos. Buscamos durante lo que queda de este año ser el player número uno en Latinoamérica en inteligencia en logística”.