Las compañías vinculadas a las criptomonedas han decidido seguir un camino claro en su estrategia de marketing: la apuesta por la publicidad en el deporte.
El objetivo, ser populares.
La última demostración llegó en los anuncios del Super Bowl 2022 que ganaron los Rams de Los Ángeles este domingo 13 de febrero cuando el anuncio de Crypto.com fue uno de los más efectivos. También estuvieron marcas como Coinbase y FTX.
El exchange de criptomonedas Crypto.com también firmó un acuerdo comercial por U$S 700 millones para poner su nombre al Staples Center en Los Ángeles, ahora el Crypto.com Arena.
Pero anuncio del Super Bowl y el naming del Staples son sólo un par de pasos de Crypto.com en el mundo de la publicidad. En 2021 lanzó una estrategia de U$S 100 millones en veinte países que fue protagonizada por Matt Damon, firmó un acuerdo de patrocinio con los Philadelphia 76ers de la NBA, con Ultimate Fighting Championship y la F1, entre otros.
Sin embargo, las fuertes inversiones de esta empresa de Singapur con apenas seis años de vida generan desconfianza en algunos sectores. Un informe de Reuters de este lunes 14 de febrero dice que “sus finanzas no son completamente públicas” y lamenta que “Crypto.com no ha revelado quienes son sus inversores”.
En este sentido, la agencia de noticias dice que “su agresivo marketing ha llamado la atención” y que “algunos lo ven como una señal de que el mercado de las criptomonedas está ‘espumoso’ y que es una burbuja a punto de estallar”.
El marketing de Crypto.com en el Super Bowl 2022
Crypto.com tiene sede en Hong Kong y es el sexto exchange cripto del mundo por volumen diario, según CryptoCompare. Posee más de 9,9 millones de usuarios.
Su objetivo es más que ambicioso: quiere llegar a los mil millones de clientes y convertirse en una de las 20 marcas globales más relevantes.
El mercado en el que participa avanza, y mucho. El negocio de las criptomonedas en 2021 creció hasta más de los 3 billones de dólares.
La empresa nació como una wallet de monedas digitales llamada Monaco y luego de una fuerte recaudación de fondos tras un lanzamiento inicial de tokens se convirtió en un exchange en 2019.
De la misma manera en que lo hacen FTX, Coinbase (creador del anuncio con el código QR que dio de qué hablar en el Super Bowl 2022) o Binance, por ejemplo, recibe ingresos de las tarifas por las transacciones, así como por las tarjetas de débito que ofrece en asociación con Visa.
De acuerdo con su web, posee tres mil empleados y, por estos días, busca cubrir 580 puestos distintos en mercadotecnia, recursos humanos, ingeniería y desarrollo comercial.
A diferencia de Binance, Coinbase y otros exchanges, que tienen inversores de Wall Street, Crypto.com asegura que nunca ha recaudado fondos institucionales; este es uno de los puntos en los que apoya su marketing.