Mientras la soja sigue con un rally alcista en medio de los recortes de producción en la Argentina, Brasil y Paraguay, a los productores locales les queda mucho menos de lo que marcan las cotizaciones internacionales (hoy en la Bolsa de Chicago hizo US$581,19 la tonelada del contrato marzo) e incluso respecto de lo que pueden recibir sus pares de la región, prácticamente a la par del mercado global.
La razón de la diferencia: las retenciones del 33% que pesan sobre el grano de la oleaginosa, además de la brecha cambiaria que existe en el país con las distintas cotizaciones ligadas al dólar. Según un informe de Diego Pasi, analista de mercados de la consultora AZ- Group, hoy al productor de soja argentino le queda cerca de un magro 35%.
“Los cálculos son simples: sobre el precio FOB Argentina (precio de exportación) del orden de US$634 la tonelada, al descontar los gastos de embarque (aproximadamente de US$15 por tonelada) se llega a un valor de 619 dólares por tonelada. Si se descuenta luego el 33% de derechos de exportación, quedan aproximadamente US$410″, explicó.
Como la cuenta no termina ahí, explicó que cuando se aplica la brecha cambiaria entre el dólar oficial y el dólar MEP “el valor final cae a US$204″
“El productor (de la Argentina) cobra aproximadamente el 35% del precio internacional de la soja, medido en dólares billete”, señaló Pasi en su reporte.
El tema del efecto de la brecha cambiaria viene siendo motivo de reclamo de los dirigentes del agro. Ayer, en una exposición ganadera en Comodoro Rivadavia, en la provincia de Chubut, Nicolás Pino, presidente de la Sociedad Rural Argentina (SRA), apuntó a la brecha cambiaria como una de las dificultades que hay que corregir en el país. “Vendemos nuestros productos a 100 y pagamos los insumos a más de 200″, expresó.
Para comparar, Pasi señaló que en Uruguay la semana pasada el precio de la soja recibido por los productores fue de 567 dólares por tonelada, “prácticamente equivalente al valor vigente en el mercado de Chicago (sobre 570 dólares la última semana)”.
“Habitualmente, en el mercado uruguayo hay una prima negativa que se descuenta del precio. Sin embargo, por la falta de producción de Sudamérica, actualmente es de -5 a +10 dólares por tonelada de acuerdo al lugar de entrega”, señaló el asesor.
Los cálculos que hizo Pasi no se limitan a la soja, ya que el efecto retenciones (descontado el gasto de embarque) más brecha también se puede observar en otros productos. “Con el maíz (paga 12% de retenciones) el productor cobra 116 dólares billete por tonelada vs los US$280 del precio FOB de exportación. En este caso, el agricultor recibe el 46% del valor internacional”, señaló.
En cuanto al caso del trigo, tras los efectos de los derechos de exportación (12%) y la brecha cambiaria, Pasi dijo que el productor cobra US$121 billete por tonelada contra los US$307 del precio de exportación. “El importe real cobrado es del 44 % respecto del precio internacional”, remarcó.