Cristian Melgarejo es un joven muralista y grafitero marplatense que se ha convertido en un verdadero suceso en tierra napolitana con sus murales dedicados a Diego Armando Maradona.
Cristian, conocido como “el Flaco” o “el Tortu”, es hijo del reconocido periodista radial Julio Melgarejo, de amplia trayectoria en nuestra ciudad y radicado desde hace más de diez años en Málaga, España. Al igual que sus dos hermanos, Federico y Agustín, él buscó en el Viejo Continente la posibilidad de convertir su facilidad para el dibujo y la pintura descubierta en su época de estudiante, en un oficio que hoy le permite trabajar poniendo su arte en bares, comercios, hoteles y cuanto lugar aparezca para darle color a distintos lugares de España, y desde hace un tiempo desembarcar en Nápoles, la tierra italiana donde “el 10” es considerado un verdadero Dios.
“Creo que aquí lo quieren más que en la Argentina, porque nosotros siempre tenemos las distintas opiniones entre el jugador y la persona, pero aquí es increíble, hay que ver para creerlo. Yo estoy viajando mucho a Ercolano, un pueblito a 15 minutos de Nápoles, que es la ciudad central. Y aquí solo basta caminar por cualquier lugar y cuando se enteran que sos argentino cambia todo y ahí se produce la explosión. Yo me siento muy identificado, son muy parecidos a nosotros.”
En diálogo con Beto Mena en “Desparramando Cultura” , recordó sus comienzos en Mar del Plata: “De chiquito siempre dibujando para mis compañeros de colegio y ellos me hacían la tarea. A los 14, 15 conocí a mis amigos del grafiti y armamos un grupo con el que andábamos callejeando, somos como una segunda generación que comenzamos a pintar nuestros dibujos en distintos lugares. Y por allí apareció alguien a quien le gustó lo que hacíamos y tuvimos nuestro primer laburo en un negocio de la zona de Güemes. Yo tenía mi trabajo de otra cosa y por ahí se hacía difícil. Luego en el 2006 viajamos a Málaga con uno de mis hermanos para estar con nuestro padre y allí pude empezar a desarrollarme en la pintura. Aquí hay mejores materiales, hay más cultura del tema, hay más años, y todo eso te ayuda a progresar. Después en 2008 volví a Argentina, trabajé un par de años y luego hace unos siete años, por una historia de amor me vine a Barcelona, y ahí comenzó todo. Como se me hacía difícil conseguir trabajo por el tema de los famosos papeles de residencia, comencé a hacer unas tarjetitas con un instagram para que conocieran lo que hacía y luego la conocida sanata argentina hizo el resto”.
” Yo hago un poco de todo. Mi especialidad es pintar con dibujos las persianas de los comercios o realizarles un logo, que por otra parte sirve como publicidad del negocio. Decorar la fachada de un lugar es como ponerse guapo para ir a una discoteca, llama la atención y le da promoción aún cuando están cerrados. Otra de las cosas que hago son las pizarras con las que los lugares promocionan sus productos y sus ofertas. Yo no soy letrista, pero me animé, vi unos tutoriales en internet y de ahí no paré.”
” No se si seré el primer argentino en pintar murales de Diego en tierra napolitana, marplatense seguro que sí. Ahora en marzo vuelvo a Ercolano a seguir trabajando. Todo se dio por una cuestión del destino. Yo tenía que volver a Argentina por el tema de los papeles, que ahora por suerte los tengo. En agosto del año pasado yo tenía pasaje para volver, y por el tema del Covid, un día antes me cancelan el vuelo. Tuve que elaborar un plan B, tenía que tomarme 30 días y se me ocurrió Nápoles simplemente por lo que hemos escuchado de ese lugar. y realmente fue muy loco, no conocía a nadie y ahora mirar hacia atrás y ver los amigos que hice, la calidez con la que me trataron, estar mirando el Vesubio, los trabajos que realicé y los que van a venir me hace sentir realmente un afortunado. Hoy puedo tener mi base en Barcelona, pero puedo viajar 4 o 5 veces a Nápoles, o a Bruselas, o a cualquier otro lugar. Bares, negocios o locales que necesiten alguien que les pinte una persiana o una pizarra hay en todo el mundo, así que me imagino que cuando esta situación de pandemia termine, esto va a permitirme viajar mucho y encima ganar dinero haciendo lo que me gusta.”
“Yo ya he pintado dos Maradonas en Napoles. Cuando llegué el año pasado conocí a una gente que hoy son mis hermanos y al recorrer Ercolano, que es un lugar muy bonito nos dimos cuenta que no había ningún mural, ninguna persiana con la figura del Diego, como pasa en el centro de Nápoles, donde artistas de todo el mundo han hecho obras. Y uno de estos amigos me dijo, vení que yo consigo las herramientas y la pintura para que me hagas un mural. Así que un mes después volví y lo hicimos. Y a través del instagram se comenzó a conocer y empezaron a contactarme para otros trabajos. Y en la tercera visita ya hice todo un trabajo de composición en un local de apuestas deportivas y después varias persianas. Ahora vuelvo en marzo con diez trabajos encargados y Maradona sigue siendo lo más pedido. Por eso me esfuerzo cada día para hacerlo mejor. Lo que pasa aquí es increíble. Entré un día a una tienda oficial del Nápoli en Ercolano a comprar un gorrito de recuerdo y terminé charlando con el dueño que ya me encargó que le pinte todo el local con motivos maradonianos. No soy el único que se dedica a pintar este tipo de homenajes, pero por suerte en este lugar lo que hice empezó a desatar un fenómeno que me permite seguir trabajando y realmente me pone muy orgulloso. Todo esto es muy loco, muy hermoso, y uno todavía no toma dimensión.”
Los trabajos se pueden apreciar en el Instagram @le_turttle
Escuchá la nota completa con Cristian Melgarejo en el programa “Desparramando Cultura” con Beto Mena